Classroom of the elite: Clase S

¡Comienza la misión!

Abril, con la llegada de la primavera, y los pétalos de cerezo embelleciendo el paisaje, iniciamos este nuevo capítulo de nuestra vida llamado preparatoria.

Ichika: ¡Quítate de mi lugar, Takuya!

Takuya: ¡¿Ja?! ¿Quién dijo que este era tu lugar, Ichika? 

Ichika: ¡¿Buscas pelea?!

Pero ya comenzamos con el pie izquierdo.

Kiyotaka: Y ahora por qué están discutiendo.

Ichika: Kiyotaka-senpai~, Takuya se sentó en el lugar más cómodo, yo quería sentarme ahí.

Takuya: ¡Ni hablar! Siempre acaparas todo para ti como si nada, esta vez no será igual.

Kiyotaka: ¿Por qué no lo deciden con piedra, papel y tijera?

Takuya: ¡Muy bien, así será!

Ichika: Q-Qué injusto, Takuya siempre gana, su suerte está a otro nivel.

Takuya: Vamos, Ichika, ¿acaso tienes miedo?

Ichika: ¡¿Ja?! Muy bien, tú lo pediste.

Son como dos niños pequeños.

Takuya: Aquí vamos, piedra...

Ichika: Papel o...

Kiyotaka: Tijeras.

Takuya:¿Eh?

Ichika: ¿Eh?

Kiyotaka: Yo gané.

Reclamé mi lugar ganado justamente, yo también quería este lugar.

Takuya e Ichika se sentaron derrotados en los asientos normales.

Shiro: ¿En serio les quitaste su lugar, Kiyotaka?

Kiyotaka: Es muy cómodo, este asiento tiene tapicería nueva, por lo que es más suave, perfecto para un largo viaje. 

Íbamos a ir de la mansión de ese hombre a la escuela, diría que son unos cuarenta minutos de viaje.

???: ¿Ya se abrocharon los cinturones?

Yuki: Sí, ya estamos listos, Matsuo-san.

Shiro: Sigues siendo muy formal al hablar, Yuki.

Yuki: ¿En serio? Kiyotaka dice que está bien.

Shiro: No creas todo lo que dice Kiyotaka, su mentalidad es la de un señor de cuarenta años.

Kiyotaka: Oigan, sigo aquí, puedo oírlos.

En serio, este grupo es cualquier cosa menos coordinado, a pesar de haber convivido por más de un año.

Ese hombre nos envió a nosotros tres a su mansión, por lo que hemos vivido juntos desde entonces. Al inicio la convivencia fue bastante difícil, en especial con Takuya, diría que hemos arreglado esas diferencias, no somos los mejores amigos, pero ahora podemos hablar entre nosotros normalmente.

Ichika fue un problema, aunque no de la misma manera que Takuya, de hecho, fue todo lo contrario, y es que ella quería estar conmigo todo el tiempo, hubo varios intentos de espiarme en el baño, varias veces que se metió a mi habitación en la noche, todo un terremoto viviente.

Shiro y Yuki siguieron viviendo con sus familias, pero nos veíamos casi a diario, por lo que nos acostumbramos bastante rápido a las disputas entre nuestros kohais.

La única excepción es Yuki, y es que a ella no le hace ninguna gracia que Ichika quiera dormir conmigo o que me espíe cuando me baño, pero supongo que es lo normal, a ninguna novia le gustaría que su novio durmiera con otra chica.