Aparece un inusual amor

Capítulo 116: Divorcio

Ya era temprano en la mañana cuando Xu Jiale subió las escaleras. Golpeó suavemente la puerta, pero Jin Chu probablemente aún estaba despierto, y rápidamente le abrió.

"Hola" lo saludó Jin Chu, y sus ojos se posaron de inmediato en el vendaje del brazo de Xu Jiale, preguntando con sorpresa y preocupación, "¿Qué le pasó a tu mano? ¿Estás herido?"

"No es nada," respondió Xu Jiale con calma y rapidez, usando el tono más tranquilizador. "Me rasguñé un poco mientras manejaba una moto hace un rato, es solo una herida superficial, así que fui al hospital a que me la vendaran."

Jin Chu abrió la boca pero no insistió más.

Los dos se miraron en la puerta durante unos segundos, ambos con algo que querían decir pero no se atrevían.

Finalmente, Jin Chu dijo en voz baja: "Nanyi todavía está dormido, ¿por qué no vamos... al balcón a hablar?"

Xu Jiale asintió, y siguió a Jin Chu mientras atravesaban el dormitorio. No pudo evitar mirar a Nanyi acostado en la cama.

Cuando se sentaron en las sillas de mimbre del balcón, Xu Jiale notó una lata de cerveza abierta en una pequeña mesa cercana y miró a Jin Chu.

"Bebí un poco hace un momento," dijo Jin Chu.

Sentado junto a Xu Jiale, Jin Chu continuó, "Jiale..."

Llamó el nombre de Xu Jiale pero no dijo nada más. Miró la vista nocturna del complejo turístico desde el balcón, aparentemente perdido en sus pensamientos.

"Jin Chu, dijiste en WeChat que estás listo para contarle a Nanyi... ¿Es cierto?"

Aunque Xu Jiale estaba acostumbrado a que Jin Chu se distrajera, esta vez no pudo evitar interrumpir los pensamientos errantes de este omega.

Para él, esa pregunta era demasiado importante, tanto que tuvo que controlar un poco su tono para mantenerlo estable.

"..." Jin Chu levantó la lata de cerveza y, después de tomar el último sorbo, miró a Xu Jiale.

"Es cierto." Finalmente dijo lentamente.

El último sorbo de cerveza en la lata siempre es el más amargo.

El sabor sube desde el estómago y se extiende en la punta de la lengua, como un reflejo de la vida misma.

Jin Chu sonrió ligeramente: "Jiale, ¿quieres preguntarme por qué de repente cambié de opinión?"

Es una pregunta interesante.

Se miraron a los ojos, y los profundos ojos de Xu Jiale detrás de sus lentes mantuvieron la mirada de Jin Chu. Después de un par de segundos, habló con una voz baja y profunda, "Jin Chu, gracias."

De repente, Jin Chu sintió que sus ojos se llenaban de lágrimas.

"Después de que Nanyi se durmió, me sentí un poco sofocado y bajé a tomar aire fresco. Sin pensarlo, seguí el sonido de la música hasta la piscina. Jiale, te vi en el escenario."

"Nunca te había visto bailar así, en realidad... fue bastante divertido."

Al decir esto, su expresión se volvió amarga, pero sonrió levemente.

Miles de palabras se redujeron a un simple "fue bastante divertido."

Esa noche, cuando la multitud rodeaba entusiastamente el escenario, él estaba en un corredor remoto abajo, mirando durante mucho tiempo.

Nadie lo notó, y Xu Jiale en el escenario tampoco.

Xu Jiale, con una camiseta sin mangas blanca y medias, comenzó torpe e inseguro, pero gradualmente bailó con creciente entusiasmo, incluso moviendo descaradamente la cola de conejo pegada a su trasero.