Aparece un inusual amor

Capítulo 125: Márcame

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Xu Jiale respiró hondo.

La cálida lengua del omega pasó sobre su herida, pero la sensación era como si la punta de la lengua estuviera cubierta de espinas, convirtiendo el lamido en un dolor ardiente y punzante.

Pero en ese momento, una intensa dulzura inundó su cuerpo, e incluso el dolor en su cuello se transformó en una sensación agradable.

Se incorporó y, soportando el dolor, utilizó su mano para levantar la cara de Fu Xiaoyu de su cuello.

"Gatito", la voz de Xu Jiale era ronca, con una emoción oculta que no podía disimular: "Tú realmente..."

Se detuvo—

¿Realmente quieres que te marque?

A pesar de que los feromonas de menta se habían vuelto intensas y picantes, y aunque el omega había emitido una invitación clara hace unos segundos.

En su corazón aún había un momento de duda gentil.

Esa ternura siempre lo hacía parecer menos un alfa tradicional.

Un poco blando.

Y el pequeño rostro de Fu Xiaoyu estaba en la palma de su mano, mirándole con intensa concentración.

Los ojos marrón claro tenían una capa de brillo húmedo y suave.

A pesar de que ese omega acababa de dejar una marca sangrante detrás de su oreja con una mordida feroz, en ese momento, Xu Jiale vio una expresión casi sumisa en los ojos redondos de gato de Fu Xiaoyu.

Resulta que este orgulloso gatito también podía mostrar esa expresión frente a él.

Ese pensamiento hizo que Xu Jiale se volviera repentinamente decidido, sus ojos se entrecerraron peligrosamente. Sin esperar la respuesta de Fu Xiaoyu, se giró y se subió a la cintura del omega, inclinándose sobre él, cubriéndolo por completo con su cuerpo.

"Uh..." Fu Xiaoyu no pudo evitar gemir.

Su cuello fue agarrado de nuevo, y esta vez, sería verdaderamente marcado.

Plenamente consciente de esto, el cuerpo de Fu Xiaoyu instintivamente comenzó a temblar.

Xu Jiale era pesado, presionándolo intensamente, haciéndolo sentir como si estuviera sujeto por una gran bestia, sin ningún lugar por donde escapar y con una sensación asfixiante.

El aliento caliente de Xu Jiale seguía posándose en el cuello de Fu Xiaoyu, y el aroma de feromonas mentoladas se hizo tan fuerte que era casi abrumador.

Fu Xiaoyu sabía que esta era la señal de que el Alfa comenzaba oficialmente el proceso de marcado.

Apretó en silencio las sábanas, su respiración se volvió acelerada y sintió que cada poro de su cuerpo respiraba acaloradamente.

El Alfa inició por fin la acometida final...

Xu Jiale primero succionó la glándula del omega, tomando el pequeño y abultado lugar en su boca a través de una fina capa de piel, chupándolo con fuerza.

"Ah, uh..." El sudor brotaba de la nariz alta de Fu Xiaoyu: "Xu Jiale..."

Para un Omega, la etapa antes de que la glándula fuera mordida es sin duda la más cruel.

Pero para un Alfa, cada segundo de asalto a la glándula del Omega antes de usar realmente sus dientes es el momento físicamente más satisfactorio.

Y entonces llegaron los dientes.