capítulo 8

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Force convenció a todos de verse otro día, les explicó que no era necesario que lo acompañaran a su casa porque se encontraba bien. a quien más le costó convencer fue a Satang, pero terminó cediendo cuando se puso serio.

los convenció a todos, menos a Book, quien le relató a sus padres hasta el último detalle de la pelea en cuanto entró en la casa.

— mi pequeño, — su madre lo abrazó. — ¿estás bien?, ¿ya te revisaron?

— sí, mamá. — se sintió tímido por ser tratado así frente a Book. — estoy bien. Satang también lo está. 

— hace años que no te metías en problema. — su padre revolvió su cabello.

— ¿años? — repitió Book.

— sí, antes íbamos mucho a su escuela, durante la secundaria, — contestó su madre. — es valorable que hayas defendido a un amigo, no importa la suspensión. — habló mirándolo a él.

Book lo miró fijamente, sin comprender la situación. — ¿no te has metido en problemas todo este tiempo?

— ¿sucede algo? — preguntó su padre, alternando la mirada entre ambos.

— nada. — sonrió Force. — Book se quedará a cenar, preparemos la mesa.

mientras comían, sus padres comenzaron a hacerle preguntas a Book sobre cómo era Force en la universidad y cómo era su grupo de amigos, a quienes aún no conocían.

— ellos estarán felices de venir en estos días que Force tiene libre. — Book organizó una reunión por su cuenta.

— me encantaría, te daré mi número para que me digas cuándo vendrán. — su madre se llevaba muy bien con Book. — supongo que ustedes son la influencia que ha tenido a mi hijo sonriendo más.

— y el chico que le gusta. — comentó su padre. Force quería convertirse en una avestruz, para hundir su cabeza en la tierra.

— ¿cuál chico? — preguntó Book.

— el chico del taller de alfarería. — mencionó su padre.

¿por qué había tomado la mala decisión de contarles que le gustaba alguien? daba gracias al Force del pasado por no haberles dicho el nombre.

— mamá, ¿qué cosas dices? — Force sintió que estaba colocándose de todos los colores posibles al sentir la mirada de Book en él.

— nunca te había visto nervioso, hijo. — su padre comenzó a reírse, cambiando de tema como forma de ayudarlo.

— 💌 —

tras la cena, terminaron en su habitación, Book se sentó en la cama, mientras Force lo miraba desde la puerta, en la cual estaba recargado.

— soy todo oídos. — habló Book ante el silencio. — ¿cómo es posible que tus padres no notaran que en ocasiones llegabas un poco golpeado a casa? se ven que son muy atentos contigo.

— ¿quieres que te cuente una historia triste, aburrida y larga? — Force sonrió a medias. 

— si quieres contármelo, adelante.

— en secundaria sufrí acoso escolar, durante el segundo año. — comenzó a contarle. — no creas que me convertí de un maltratado a un maltratador, sé que tengo una mala fama, Book, pero la mayoría de las veces que terminé en dirección fue solo porque los profesores reportaban que yo discutía con todos, no llegué a los golpes siempre.

— escuché que peleabas, — Book estaba confundido. — todos lo dicen. aparecían chicos golpeados, si les preguntabas decían que tú lo habías hecho.

— en eso consiste tener una mala fama. — rió Force, aunque no parecía que le hiciera gracia. — soy serio, no hice amigos, le respondía mal a todos, incluidos los profesores. soy un blanco fácil de culpar, entiendo que creyeran esas historias. 

Book jamás esperó esa revelación. — te vi golpeado.

— dije que no llegué a los golpes siempre. — repitió. — si fuera la máquina de matar que todos dicen que soy, ¿crees que habría terminado como estoy ante cuatro chicos?

— entonces, ¿reaccionabas mal ante lo más mínimo para evitar volver a ser un foco de maltrato? — se atrevió a preguntarle.

— algo así, suena incluso poético. — Force se sentó a su lado, mirando el suelo al hablar. — yo no les hacía nada, ¿sabes? a esos chicos que me golpeaban simplemente les molestaba que yo existiera. mis padres fueron cientos de veces a presentar quejas ante el director, pidieron intervención del psicólogo, de un asistente social, de un policía, incluso hablaron con los padres de esos chicos, nadie hizo nada por mí, así que mis padres optaron por cambiarme de secundaria, en lugar de seguir yendo al hospital. 

— por eso al darle las gracias a Satang le dijiste que nunca nadie te había defendido. — Book no se dió cuenta de que había comenzado a llorar, pero sus mejillas estaban empapadas por las lágrimas. — por eso no querías amigos, porque sin motivo habían sido crueles contigo.

— no llores, Kasidet. — Force había volteado a verlo, preocupado.

Book lo abrazó, sin importarle nada más. — no vas a estar solo nunca más.

— nunca me sentí solo, tenía el amor de mis padres, no necesitaba más. — contestó Force. — no sientas lástima por mí.

— no siento lástima, Force. — Book lo estrechó más entre sus brazos. — solo quisiera que las cosas hubieran sido diferentes para ti.

— el pasado no puede cambiarse, Kasidet. — Force se relajó entre sus brazos, dejándose querer. — pero gracias a ti, que me incluiste en tu grupo, que me hiciste tu amigo, mi presente y mi futuro sí son diferentes.

— me alegra el corazón que te sientas parte de nosotros. — sonrió tímidamente Book, dejando por fin de llorar.

— me siento parte de ti. 

Book retrocedió para verlo a la cara, pero la distancia era tan escasa que sus respiraciones comenzaron a mezclarse, ¿sería el momento adecuado para besarlo?

— ¿soy el chico que tu mamá dijo que te gusto?

— ¿te refieres al chico por el cual me motivé a participar en actividades y comencé a ignorar a los tontos y a sus comentarios? — Force hizo una pausa. — sí, Book, eres tú quien me gusta, el chico que nunca se sintió intimidado por mí, y quien siempre me regaló sonrisas amables.

Force rió, lo atrajo por la nuca, y acercó a Book lentamente hacia él. sus labios se rozaron suavemente, en un muy corto beso.

Book parpadeó varias veces cuando se separaron — ¿me besaste?

ante la duda, Force volvió a unir sus labios, unos segundos más, sintiendo a Book moverlos contra los suyos, besándose con timidez, sintiéndose uno parte del otro.

— ✨✨✨ —

momento de ositos cariñositos.

¿Dijiste abrazo? | ForceBookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora