El Regalo De Dios

Mi nuevo destino

Ya han pasado unos días después de aquella rara experiencia que tuve en el bosque, al parecer el día siguiente de eso el dueño de aquellos dos pokemon se sorprendió cuando se llevó a casa un gran huevo, valla que el pobre estaba desconcertado.

Mi vida a seguido su curso normal pues no a habido incidentes mayores...
Asta hoy!, pues mientras competíamos como siempre entre nosotros, leo evolucionó!, este estaba en una pelea contra max cuando tras un descuido de este, leo lo tacleo ganando la batalla -toma, te gane- diria leo cuando repentinamente un brillo raro de colores lo cubriría por completo, y para cuando el brillo desapareció, ¡valla sorpresa!, pues leo habia evolucionado en un leaffeon, era bastante impresionante y tengo que admitirlo majestuoso, al verlo todos nos acercamos a el mientras lo veiamos con asombro ademas le felicitabamos por su evolución, tras toda le escena una pregunta llegó a mi mente, ¿que se sentiría evolucionar?.

Cuando su amo llegó valla si se dió una gran sorpresa al ver su evolución, parecía bastante feliz y eso en consecuencia hacia feliz a leo, ¡me alegro por ellos!, en fin, al día siguiente de eso tambien resultó pasar algo extraño pues al parecer la señora olivia dijo que se sentía mal por dejarme dormir en la cuna de los huevos ya que me consideraba parte de la familia por lo que me dijo que ahora en adelante dormiría en la habitación de Johnny en una pequeña cama que tenía al menos asta que remodelarán una habitación para mi, bueno pues creo que se imaginaran mi gran cara de sorpresa cuando escuche eso, ya que aunque ya no me llevaba tan mal con Johnny no me sentiré muy cómodo durmiendo en la misma habitación que el, y el, parecía tampoco estar tan de acuerdo pero al final no le quedó de otra y a mi tampoco por lo que desde ese día empeze a dormir en su habitación.

La primera noche que pase en ella fue por llamarlo de alguna forma rara ya que al caer la noche me dirigí por instinto a la cuna, pero pues al ya no tener el banco para subirme, recorde donde tenia que dormir y con mucho esfuerzo, subi las escaleras, al llegar a la puerta de la habitación estaba cerrada por lo que toque está y al segundo siguiente un estruendo se escuchó, me pareció aver espantado a Johnny y algo divertido di una risita, unos segundos después la puerta se abrió y Johnny asomo su cabeza, al principio pareció no verme debido a mi tamaño lo que me iso sentirme ligeramente ofendido, por lo que le tuve que gritar para que mirara hacia abajo -goooot- al escucharme miro hacia abajo y viéndome pareció recordar algo por lo que se apartó y me dejó pasar, al entrar me sorprendió lo limpia que estaba la habitación ya que siempre pensé que está estaría echa un desastre, la habitación no era muy grande aunque si con el suficiente espacio para una persona, al parecer cuando toque lo sorprendí haciendo algo en la PC pues está estaba prendida y la silla estaba tirada a un lado, no le tome mucha importancia y voltee a verlo.

-Bienvenida, supongo, tu cama está en esa esquina de allá- me dijo señalando una pequeña cama que me hizo recordad a esas camas para perro de mi mundo, lo que me hizo reafirmar un poquito más que era una mascota, -mientras no me molestes cuando me encuentro haciendo algo, eres más que bienvenida- dijo acostándose en la cama y tomando un libro, yo solo lo mire extrañado mientras caminaba a mi cama para dormir, cerrando mis ojos quede instantáneamente dormido, al cabo de unas horas escuché un ruido extraño que me despertó, parecía se Johnny quien estaba algo agitado, aunque tenía curiosidad de lo que estaba haciendo preferí ignorarlo y mejor continuar durmiendo.

Al día siguiente me pareció que habia dormido bastante pues cuando abrí mis ojos Johnny no se encontraba en al habitación y la puerta estaba abierta, me levanté y sali de habitación oara después con cuidado bajar las escaleras, al llegar al piso de abajo pude ver al señor Rodrigo en el recibidor atendiendo unos clientes mientras la señora ponía un huevo y un pequeño Pokémon el cual no pude ver en la cuna, yo prefiriendo no molestar salí al patio donde valla sorpresa la mia habia bastantes pokemon, parecía ser de esas veces que la guarderia se llenaba lo que rara vez pasaba, con cuidado pasando por el patio intentando no chocarme con nadie llegue a la "base" donde ya se encontraban mis amigos quienes estaban charlando de algo, -hey, Hola! Que están haciendo?- dije, al notar mi presencia se voltearon a verme y me saludaron para después contarme lo que sucede -pues resulta que me voy a ir con mi ama a un viaje por toda la región ya que al parecer ya a ahorrado lo suficiente por lo que ahora va a empezar su viaje- dijo max algo triste pero con una evidente mirada de emoción -me alegro por ti mi amigo, siempre es emocionante viajar por el mundo- le dije con un tono de sorpresa, -si..., aunque posiblemente no nos volvamos a ver y eso me entristece- dijo agachando si cabeza, -eso no es verdad, te aseguro que nos volveremos a ver algun dia, talvez cuando ya todos hayamos evolucionado y seamos muy fuertes, Haci que concéntrate en convertirte en alguien fuerte para que Haci cuando nos volvamos a ver, tengamos una pelea para ver quien es el mas fuerte- dijo Ray alzando su voz emocionada -ray tiene razón, vuelvete alguien fuerte porque cuando nos veamos, no tendré piedad- dijo leo burlonamente, -gracias chicos, aunque por hoy solo quiero pasar el dia con mis amigos y jugar con ellos antes de irme- tras esto nos levantamos y tras un raro saludo que nos inventamos en ese momento, max nos tiraria al piso abrazandonos y creando una especie de pelea campal entre nosotros esto, a modo de juego.

Al cabo de unas horas llegó la noche, y con ella la despedida, max siempre fue considerado el líder y el capitán de nuestro grupo, y sin el, supongo que la segunda al mando es Ray pero aún Haci lo extrañaremos, yo lo extrañaré, por su despedida y como simbolo de nuestro encuentro, los 3 le obsequiamos una pulsera, cada una con nuestros colores para que siempre nos llevase consigo, y Haci, max se fue, quien diria que ese dia, fue el ultimo que estuvimos los cuatro juntos, tras esto los demas tambien se fueron y yo, fui a dormir.

A la mañana siguiente un estruendo me despertó, era Johnny quien parecía algo apurado y con bastante preocupacion en su rostro mientras echaba en una gran mochila que parecía de esas para ir a acampar una gran cantidad de ropa y objetos para que después se la colgase en su espalda, e instantáneamente salir de la habitación, algo confundido decidí levantarme y seguirlo viendo como la señora olivia lo había retenido en la planta de abajo y parecían discutir sobre alguna cosa, -y como planeas irte si no tienes dinero y nisiquiera un pokemon?- -ya vere como me las arreglo abuela, tengo que irme lo antes posible y tomar un barco a paldea- - y crees que eso va a solucionar algo- -...- en ese momento termine de bajar las escaleras -escucharme hijo- le dijo el señor rodrigo tomándole del hombro -tu padre falleció, se cómo te sientes y se que quieres irte corriendo a paldea y vengarlo pero...- en ese momento fue interrumpido -lo se abuelo, lo se, se que talvez no pueda hacer nada y mi viaje sea en vano, pero no quedare con los brazos cruzados vivir como si nada hubiese pasado, haci que se los pido por favor, dejenme ir- en ese momento con una mirada triste y orgullosa los señores flores abrazaron a su nieto con el cariño que solo los abuelos pueden darte, Haci quitandose de su camino -bien, ve, pero por lo menos dejame hacerte un pequeño regalo- diria la señora mientras de detras de el recibidor sacar un par de zapatos deportivos los cuales le daría a su nieto, Johnny la miraria confundido pero también agradecido dandole otro abrazo a su abuela para después el señor Rodrigo decir algo -yo también te tengo algo, se que no tienes algun pokemon propio por lo que me gustaría que te la lleves con Tigo- diria para sacar de su bolsa una pokebola de color blanco con el centro rojo y dándosela en sus manos a johnny, -planeaba que fuese tu regalo de cumpleaños pero parece que este tambien es buen momento-
-estas seguro abuelo?- diría Jhonny sorprendido como reconociendo la pokebola, -si, lo estoy, ahora que estás esperando, atrápala- diria el señor para ver como Johnny se giraría Haci ¿Mi dirección? Y me lanzaría la pokebola dándome en la cabeza -¡Ita!-
Sería lo único que alcanzaría a decir para después desaparecer de la habitación y aparecer en un lugar extraño, parecido a una habitación blanca con una cama en medio de esta, por alguna razón me entraria sueño haci que acostandome en la cama me quedaria dormido.
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1... 2... Y puf, Pokémon atrapado, diría Johnny en su cabeza mientras recoge la pokebola de aquella que se convertiría en su primer Pokémon, Haci dándole un último abrazo a sus abuelos y saliendo de la guardería hacia lo desconocido, tenía un objetivo claro en su mente e iba a hacer lo que fuera oara conseguirlo, Haci, comenzando a caminar por la calle hacia el pueblo mas cercano.