Bianca Corvus una mujer inteligente y llena de vida se ve obligada a pasar su último curso en el colegio Hogwards de magia y hechicería.
Donde encontrará no sólo grandes amistades sino una gran atracción y magnetismo por su peculiar profesor de poc...
Bianca fue guiada por Diego pasando entre la multitud hacia una sala al fondo del pasillo que por la ventana se podían apreciar los jardines de la casa. La sala estaba oscuras y únicamente la iluminaban por las velas y la luz exterior colocada para que la gente pudiera caminar por los jardines con comodidad.
- Parece que aquí estaremos tranquilos para hablar- Dijo Diego ofreciéndole pasar.
Ella había estado pocas ocasiones en esa sala, realmente no conocía mucho su propia casa pues hacia relativamente poco que se habían trasladado a ella. Esa sala no tenia muchos muebles pues a penas le daban uso.
- Si aunque... tendríamos que haber cogido alguna silla, en esta sala no hay donde sentarse- Dijo observando alrededor.
- Ciertamente.... - Dijo observando la sala- quizás podríamos... !Mira! un piano, podemos sentarnos allí.
Ambos se encaminaron al final de la sala donde había un piano al lado de un gran ventanal, él tomo asiento en el piano y ella prefirió acomodarse en el marco ancho de la ventana.
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- Bien, ya estamos más cómodos- Dijo ella mirándolo- ¿De que querías hablar?
- !Directa al grano, no pierdes el tiempo!- Dijo con una sonrisa- Antes que nada... lo que dije antes es en serio... lo siento mucho Bianca fui un idiota al dejarte de lado- Confesó algo apenado.
- De verdad no es necesario que te disculpes- Dijo ella al tiempo que subía sus pies a marco de la ventaba para poder abrazar sus piernas- me a gustado volver a verte, no tuve la oportunidad de despedirme.
- Veras Bianca... esto me es un poco vergonzoso pero- Dijo rascando su nuca- la verdad es que fui a tu casa la noche que os fuisteis... quería disculparme por todo y que volviéramos a ser buenos amigos... pero desgraciadamente llegue tarde- Dijo con pesar- y encima recibí una descarga de energía por las protecciones de tu casa ya que me había colado por la playa- Comentó algo avergonzado.
Bianca dejo que los recuerdos volvieran a ella, el tenía esa percepción de lo ocurrido porque su padre le había modificado los recuerdos de aquella noche, la realidad fue que a causa de su intromisión vio el ritual y como su padre extraía las lagrimas de luna, esa fue la causa de que se mudaran a Londres esa misma noche sin dejar rastro.
- Vaya... lo siento mucho Diego... no lo sabía- Contestó mintiendo- agradezco tu intento por reconciliarnos.
- Espero que no sea tarde para una segunda oportunidad- Dijo mirándola por unos momentos- Bueno, dejemos el pasado atrás, cuéntame, ¿Qué tal la nueva escuela?
- Sinceramente es fantástica, aquí tengo mucha más libertad- Dijo con una sonrisa- ya sabes que mi padre me tenía muy controlada y apenas salía de casa, aquí tengo muy buenos amigos, son mis hermanos, mi familia, no podría haber elegido mejores compañeros.
- !Vaya! No se si alegrarme o ponerme celoso- Aquello hizo reír a ambos- ¿Y hay alguien especial en tu vida?
- ¿Especial?- Dijo ruborizándose- no entiendo a que te refieres.
