17-¿Embarazada?

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Marshall.- No puede estarlo, no puede Gumboll es imposible, es...es inhumano.

Gumboll.- Lo que lleva dentro si que es inhumano Marshall.

Marshall.- Haz algo Gumboll, a lo mejor hay algo que sirva.

Gumboll.- No puedo hacer nada Marshall.

Marshall.- ¿Y Fiona?, ¿qué va a pasar con ella?

Gumboll.- ¿Cómo que qué va a pasar con ella? La han clavado una flecha, ¿cómo crees que está? Como muera por tu culpa lo Lamentarás.

Marshall.- ¿Qué debo de hacer con el bebé?

Gumboll.- fiona podrá ,además me tiene a mi,todos podemos cuidar del bebe

Marshall.- ¿Irme? Más quisieras tu bola de chicle.

Gumboll.- Marshall todos sabemos que eres un irresponsable, ¿cómo podrás cuidar de Fiona y de un bebé si no puedes cuidar ni de ti mismo?

Marshall.- Gumboll, sé que no soy el mejor pero por ella puedo cambiar.

Gumboll.- Pues si quieres lo mejor para Fiona, tienes que dejarla espacio .

Marshall.- No quiero dejarla.

Gumboll.- Ella lo entenderá.

Marshall.- Pero, ¿sobrevivirá?

Gumboll.- Por eso no te preocupes, está bien. La flecha no a llegado a tocar ningún órgano importante así que ahora está descansando, ¿a dónde irás?

Marshall.- No lo sé, supongo que a la Nochesfera . Debería de escribirla algo (dijo mientras se dirigía a recepción para coger un bolígrafo y un trozo de papel)

{Escribió}
Querida Fiona, siento tener que decirte que no puedo quedarme aquí, contigo. Espero que cuando te despiertes y leas la nota lo entiendas, te quiero y si hago esto es por ti, por protegerte .Volveré, no se cuando, pero lo haré, tienes a gente que te puede cuidar, nunca estarás sola. No te puedo decir a donde me voy porque se que vendrás a buscarme, quiero pedirte perdón por todo, seguro que te habré causado muchos problemas. Te quiero.

De: Marshall -Lee.

Después de escribir la nota, Marshall se fue volando hacía su casa en donde recogió todas y cada una de sus pertenencias y abrió un portal a la Nochesfera. De sobra sabía que una vez que atravesase ese portal todo aquello que le importaba se quedaría atrás y no volvería a verlo más, pero aún así y después de todos esos pensamientos ,cruzó el portal haciendo que el viento moviese algunas de sus canciones, que ahora no eran más que simples palabras sin comprender.

{Unos meses más tarde}

Cake.- ¡Fiona a comer!

Fiona.- Voy, ¡ay! ¡Gumboll estate quieto!

Gumboll.- Perdona Fiona. (Dijo riendose a carcajadas)

Cake.- Fiona, tu come que tengo que hablar con Gumboll.

Fiona.- Claro.

Cake y Gumboll salieron de la cocina para dirigirse al jardín trasero a través de la puerta trasera.

Cake.- A ver Gumboll, ¿cuándo le darás esa carta a Fiona? No para de preguntar por Marshall.

Gumboll.- Cake no puedo, se que si se la doy lo buscará. Y no está como para hacer tanto esfuerzo.

Cake.- El día que me enteré que Fiona estaba embarazada casi me da algo, y a ella también. Merece saber donde está el padre de el niño que espera, ¿no?

Gumboll.- Pero yo puedo cuidar del bebé y de ella, Marshall no sirve para nada.

Cake.- No digas eso, ella le quiere y como no le des la nota se la daré yo.

Gumboll.- Vale, se la daré. Pero no dejaré que ella salga a buscarle.

Tras una hora de disputa entre Cake y Gumboll, al final decidieron darle la carta a Fiona. Mientras esta la iba leyendo alguna que otra lágrima caía resbalando por su hermosos rostro. Claramente tanto Cake como Gumboll se dieron cuenta de que Fiona estaba leyendo la carta una y otra vez, ya que la carta en sí no era tan larga. Minutos más tarde Fiona se levanta y se mete en el baño a toda prisa y por los sollozos que de allí salían ambos sabían que estaba llorando.

Cake.- Fiona, sal por favor. Hablemos.

Fiona.- Dios Cake, estoy embarazada y ahora me entregaís una carta de mi novio que me escribió hace cinco meses.

Gumboll.- Fiona hablemos tú y yo, sera mejor. Cake por favor, ¿nos dejas?

Cake dejo la puerta del baño libre y se fue a la cocina, sin embargo Fiona no salio del baño. Gumboll oyó que Fiona se había sentado en el suelo al otro lado de la puerta y él hizo lo mismo.

Fiona.- Gumboll, ¿tú crees que él me echa de menos?

Gumboll.- ¿ Quieres la verdad?

Fiona.- Sí.

Gumboll.- Creo que se fue para olvidar, asi que no se si te echara de menos.Pero aun que él no este yo estoy aqui para cuidarte y protegerte.

Fiona.- ¿Debería olvidarle verdad? Debería de dejar de hacerme daño si se fue, fue por voluntad propia, ¿no?

Gumboll.- Fiona eres la persona más maravillosa que e conocido, no te desmorones por esto, él no vale nada y del bebé nos podemos encargar los dos.

Fiona.- ¿De veras harias eso por mi?, ¿me ayudarías con el bebé?

Fiona y Gumboll estuvieron hablando durante horas, no cara a cara, si no con una puerta de por medio. Gumboll creía que estaba convenciendo a Fiona de que se olvidara de Marshall pero no, Fiona pensaba en él siempre. Pensaba en que abría echo ella para hacer que el amor de su vida se marchara, y eso se lo preguntó durante mucho tiempo.

Por fin Fiona salió del baño con la cara lavada, más cansada y dolorida que hace unas horas. Le dijo a Cake que le apetecía salir a pasear y ella y Gumboll se fueron a Chuchelandia. Todos allí la tenían mucho aprecio ya que era su heroína, pero encima con el embarazo estaban más atentos en ella. Los habitantes de el reino no se creían que el padre fuera Marshall y tampoco sabian la razón por la que se fue, pero sabían que entre Gumboll y Fiona había algo, pero ese sentimiento solo lo sentía Gumboll.


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⏰ Última actualización: Feb 14, 2016 ⏰

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FIONA Y CAKEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora