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6 días después.

—Detesto este día—dijo Bangchan molesto.

Todos los chicos asintieron.

—No es justo que nuestros Alfas tengan reunión por dos horas y nos dejen solos—dijo Hyunjin deseando ver a Felix.

—Solo faltan quince minutos por fin, voy al baño quiero verme en el espejo—dijo Changbin de pésimo humor.

—Yo igual. Vamos todos—dijo Bangchan.

—No comprendo por qué hacen una reunión donde solo hablan de nuestros errores, y les dan un puto informe de lo que hacemos. Como si nuestros padres no fueran suficientes—gruño Hyunjin.

Los chicos se sorprendieron ante el leve gruñido, que más que temor daba ternura.

—¿C-cómo es que puedes gruñir? —le pregunto Minho sorprendido.

Uno solo podía, soltar sonidos lastimeros, ronroneos o gruñidos cuando su lobo estaba despierto.

—N-no lose—Hyunjin comenzó a asustarse al igual que los chicos.

—S-siento algo extraño—dijo Minho asustado.

—Tengo calor, d-demasiada c-calor—dijo Bangchan asustado.

Changbin gimió de dolor cayendo al piso.

—Duele—dijo Changbin atemorizado.

Fuertes aromas llenaron los baños y lo mas probable llegaban al pasillo.

—N-no—dijo Hyunjin entrando en pánico, escuchó gruñidos, pero no era ninguno de sus chicos, eran... eran Alfas desconocidos.

—Miren chicos, lindos cuatros Omegas en celo. Les dije que no ir a la reunión seria buena idea— dijeron sonrientes.

—Quiero al pelinegro—dijo apuntando a Hyunjin.

—N-no m-mi Alfa vendrá—dijo Hyunjin atemorizado.

—Yo quiero al de allá—dijo apuntando a Minho, quien comenzaba a entrar en pánico abrazando a Changbin.

—Te are sentir muy bien bonito—el Alfa agarro a Hyunjin de la mandíbula y lo obligo a besarlo mas este trataba de oponerse empujándolo.

Quédate quieto maldito Omega—Hyunjin sintió sus lagrimas recorrer sus mejillas, pero no podía de hacer nada, su cuerpo no le respondía y sentía que su cuerpo hervía.

—S-suéltame—trato de gritar atemorizado, el Alfa lo agarro de su cabello y lo jalo al primer cubículo que vio.

—N-no por favor te lo ruego—le pidió tratando de quitárselo de encima.

El Alfa rompió su ropa atemorizandolo. 

...

Felix apenas salió de la reunión fue en busca de su Omega sentía que algo estaba mal.

—Chicos vamos ya—dijo preocupado corriendo.

Por el pasillo podía sentirse el aroma de sus Omegas, este era demasiado dulce al inicio y luego estaba agrio y acido, en definitiva, estaba pasando algo malo.

—¡ALFA! —grito apenas sintió las minúsculas feromonas de su Alfa.

Los chicos entraron y vieron como los otros Alfas rompían la ropa de sus Omegas y estos estaban temblando de miedo.

Felix corrió al cubículo de donde provenía los gritos de su Omega y rompió la puerta.

—Hijo de puta pienso matarte—agarro al Alfa del cuello y golpeo su cabeza contra el lavabo.

-Nudo-LixjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora