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Bajaron del Uber y Felix quedo un poco inquieto al ver las luces encendidas, a esta hora su madre ya estaba durmiendo. Le restó importancia y abrió la puerta.

—Hyunjin, quédate detrás mío y no te muevas—le dijo apenas sintió ese aroma, un aroma que conocía a la perfección.

Su madre estaba en el piso con lágrimas en sus ojos.

—¡ERES UNA PERRA INUTIL! —le grito un Alfa de cabello rubio.

Aléjate de mi madre—dijo Felix cegado.

El Alfa se dio vuelta viendo a su hijo.

—Hola cachorro, mi lindo hijo Alfa. Tu si me entiendes, tu madre me esta desobedeciendo y sabes que los Omegas obedecen solo le doy su castigo—dijo excusándose, no quería admitir que se sintió intimidado por la voz de mando de su hijo.

Primero, no soy tu hijo, segundo, mi madre no ha hecho nada malo. Eres su estúpido Alfa deberías de haberla protegido no lastimado ¡UN ALFA PROTEGE A SU OMEGA! —Dijo furioso. Hyunjin no obedeció a Felix y corrió donde la madre de su Alfa para abrazarla. Ella se refugio en sus brazos asustada.

—S-si cariño, p-por eso la castigo, l-la estoy cuidando—dijo un tanto asustado.

No, no la estas cuidando, rompiste tu lazo con ella y la dejaste tirada cuando estaba embarazada, solo vienes cuando necesitas dinero. Vete a la mierda mi madre es una mujer que no necesita de ningún Alfa—dijo orgulloso de la mujer la cual lo había criado.

—N-no fue mi culpa, ella fue la inútil que no se cuidó—Felix molesto abrió la puerta.

—Vete, lo ultimo que are por ti es no llamar a la policía, si vuelves a venir no tendré piedad tu ya no eres mi padre y nunca lo fuiste—El señor Lee molesto he intimidado salió haciendo que Felix suspire.

—Tranquilos ya todo esta bien. Madre estoy aquí—dijo abrazándola, la refugio en su aroma haciendo que se sienta protegida.

—Ven madre, vamos a tu habitación, Hyunjin y yo te prepararemos un te—le dijo ayudando a que se levante.

—Alfa, ¿puede preparar el te? Llevare a mamá Nayeon a la habitación—le pidió.

Felix asintió con el corazón roto. Odiaba ver a su madre así, destruida por la pésima unión que le había dado la madre luna.

—Tranquila por favor, se esta haciendo mucho daño—le dijo acariciando su cabello.

—Lo lamento, e-eres el Omega de mi hijo n-no deberías de haber v-visto eso—le dijo limpiando sus lágrimas.

—No se preocupe. No necesita preocuparse por esas bobadas, debe de estar tranquila usted es muy fuerte—acaricio su rubio cabello haciendo que la Omega se sienta tranquila.

—Debería de ser mas fuerte, no puedo proteger a Felix así—dijo sintiendo decepcionada de ella por no poder proteger a su cachorro.

—Felix Hyung no necesita protección, el es fuerte al igual que su madre. Usted a sido demasiado fuerte para sacarlos a ambos adelante, se ha esforzado demasiado como para seguirse sobre exigiendo, debe de descansar y tomarse un respiro. Ya cumplió su misión crio a un hijo increíble—Nayeon abrazo a Hyunjin quien trato de no dejarla sola en ningún momento. Su dulce aroma a moras estaba agrio por las fuertes emociones, pero poco a poco comenzaba a volver a su aroma normal.

Felix escucho las palabras de su Omega con lágrimas, detestaba llorar, lo odiaba. Pero cuando se trataba de las personas que amaba podía ser tan débil y sensible a tal punto de ser sorprendente.

Limpio sus lagrimas he ingreso a la habitación de su madre sentándose a su lado.

—Mami, tranquila—le pidió dejando el te en la mesita de noche.

—Y-ya me siento mejor, g-gracias por cuidarme—le dijo con lágrimas. Felix la abrazo.

—Me has cuidado toda mi vida, es lo mínimo que debo de hacer. Siempre voy a cuidarte mamá, eres todo para mi—Nayeon se aferro a los brazos de su hijo.

—D-deben de estar cansados, vayan a dormir yo estaré bien—dijo acariciando el cabello de ambos.

Hyunjin negó rápidamente.

—Alfa, yo dormiré en su habitación, usted quédese aquí—

—Pero el doctor dijo—Hyunjin lo interrumpió.

—Mamá Nayeon es mas importante, si pasa algo le aviso—le dijo acariciando su cabello.

—Descanse, y deje esos bobos pensamientos de lado, usted es muy fuerte—le dijo con una sonrisa sincera.

—M-muchas gracias Hyun—dijo en un susurro.

—Descanse Alfa, cuídela bien—le dio un pequeño abrazo antes de salir de la habitación, podía dormir tranquilo teniendo el aroma de Felix.

—Tu Omega es increíble—dijo sentándose y poder tomar su te.

—Lo es, a veces pienso que es irreal—dijo acariciando su mano.

—Cuídalo—le pidió.

—Siempre, el junto a ti son las personas mas importantes en mi vida, por ustedes vivo y respiro, mientras este aquí nada va a pasarles—Nayeon termino su té y lo abrazo.

—Ve con el cariño, yo estaré bien—le dijo acariciando su cabello.

—Pero no estas bien—le dijo Felix preocupado.

—Lo estoy, los abrazos de Hyun y tuyos me hicieron sentir mucho mejor—le dijo sonriente—además no tienes tres años para dormir conmigo—le dijo haciéndole cosquillas.

—Pero siempre seré tu bebe—dijo Felix dejando su facha de Alfa.

—Siempre serás mi bebe y el de Hyunjin—dijo enternecida. —ahora ve con él, le costara dormir sin ti—Felix un tanto inseguro la dejo arropada y le dio un besito en su frente.

—Dejare mi aroma marcado, me hace sentir mas seguro—le dijo esparciendo sus feromonas.

—Me hace sentir protegida gracias hijo—le agradeció acomodándose.

—Buenas noches mamá—le dijo dejando su beso en su frente.

—Buenas noches hijo—

Felix salió de la habitación y fue al segundo piso, donde estaba la suya.

Quito sus zapatos y pantalón y se recostó junto a su Omega.

—Lix ¿Qué haces aquí? No dejes a mamá Nayeon sola—le dijo preocupado.

—Mamá quiere que este aquí amor, es muy terca—dijo sonriendo. Hyunjin puchereo.

—¿y si nos colamos en su cama? Me preocupa demasiado dejarla sola—dijo con un puchero.

—No es mala idea, vamos—dijo sonriente. Hyunjin asintió y bajaron al primer piso, en silencio abrieron la puerta viendo que Nayeon aún seguía despierta, pero su aura y aroma se sentían tranquilos.

La mayor abrió su cama para que ambos se recostaran.

—venimos a hacer compañía—dijo Hyunjin recostándose a su lado. Nayeon lo abrazo y así ambos pudieron dormir tranquilos. 

-Nudo-LixjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora