El 9 de enero empecé con Sophie y cada nueve de cada mes estaba fatal, pero ellas me ayudaban.
Éramos sinceras todas, nunca teníamos secretos y eso lo adoraba, fue una suerte encontrar amigas así.
Nos pasábamos el verano bebiendo, ya fueran litronas que sangría o cualquier cosa, nos lo pasábamos genial y yo empecé a conocer a un montón de chicos. Tuve como seis noviazgos en aquellos meses pero ninguno se asemejaba al que tuve con Sophie.
También caí en la hierba, me tranquilizaba y me hacia evadirme de su recuerdo.
Cambié muchísimo en aquel tiempo, me llené de piercings, ahora tengo un septum, un industrial en la oreja, dilatas pequeñas y un smile. El septum le encantaba a Sophie pero nunca se atrevió a hacérselo.
Le di muchos disgustos a mi madre, uno en especial en noche vieja, quería llamar a Sophie y decirle cuanto la extrañaba pero mi miedo me podía y acabe en un coma etílico. Fueron unos meses movidos, aunque seguía con depresión lo podía evadir a veces de aquella manera.
Descubrí mis dotes de música con una guitarra que se dejó una amiga en casa y me empecé a interesar, me compré una, hacia covers y componía en el cuarto. Aquello era mas relajante que la droga.
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Lo que nunca te dije. (Lesbian Story)
RomanceADVERTENCIA: si eres homófono no leas esto, contiene contenido lésbico. Contiene partes reales y otras ficticias.