Cap 3

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Volví a mi rutina, mientras organizaba el garaje, al final Olit aceptó mi propuesta. Leonor me ayudó a comprar las cosas que necesitaba para acomodarme y también a organizar la mudanza. Estaba feliz, ya que, pasaría más tiempo con Apolo y Max. En todo el proceso de la mudanza no vi a Olit; ella se mantuvo alejada. Aproveché ese mes para participar con los gemelos en clases de natación, pues próximamente cumplirían dos años. Apolo era el más comunicativo y aprendía muchas palabras con facilidad, Max era más tímido y le gustaba ser más observador. Estaban en la mejor etapa para enseñarle algunas cosas.

2 meses después...

La relación con Olit mejoró; por lo menos nuestras conversaciones ya no solo eran de los bebés, sino de cómo nos iba en lo laboral y otros temas. Sabía que a ella aún le costaba tenerme cerca, ya que, por ratos, me miraba con tristeza y arrepentimiento. A mí me había costado mucho, pero al ser la culpable, entendía que no podía hacer más que esperar. El cumpleaños de los gemelos estaba encima y corríamos para dejar todo listo para la fiesta. Vendría la familia de Olit y mi familia, eso incluía a mis amigas y a Dani, por supuesto, a quien no veía desde la boda.

_ Gaby.

_ Señora.

_ Necesito que cuadres mi agenda y canceles todo lo del jueves y viernes. La fiesta es el sábado y siento que me faltan un montón de cosas.

_ Sí, señora.

_ ¿Conseguiste lo que te pedí?

_ Sí. Ah, y la señorita Leonor viene subiendo.

_ Perfecto.

*Sonido de la puerta*

_ Adelante.

_ Hola querida.

_ Hola, Leo.

_ ¿Cómo vas? Te ves... atareada. — Frunció las cejas al ver el reguero que tenía en mi escritorio.

_ Lo estoy. Tengo mucho trabajo y la fiesta de los gemelos me tiene todo patas arriba.

_ Lo veo, je, je, je. ¿Necesitas ayuda?

_ ¡La verdad, sí!

_ Bueno, ¿qué hago?

_ Podrías ayudarme mirando en la tablet las cosas que me faltan por comprar. Algunas ya están tachadas.

_ Viko, ¿por qué no contrataste a alguien para qué se encargará de todo?

_ Pregúntaselo a Olit. Le dije que nosotras no podíamos hacer esto y dijo que sí, que era el cumpleaños de los gemelos, que su primer año no se pudo celebrar por el COVID y encargarnos  nosotras lo hacía más especial.

_ ¿Cuántos invitados hay?

_ Pocos, algunos niños de la clase de natación y otros del kinder. Somos más adultos que niños, ya que mis amigas no se dignan a tener bebés.

_ Ja, ja, ja, si entre lesbianas se pudiese tener bebés, tendríamos otro kinder.

_ No lo dudo.

_ ¿Cómo estás tú? Anoche me dijiste que tuviste una discusión con Olit. ¿Qué pasó?

_ (Respiré profundo) Sí, anoche discutimos por Dani.

_ ¿Por Dani?

_ Sí. Estábamos revisando las personas que iban a asistir a la fiesta y como no hicimos invitación salvo para los niños, se entiende que de nuestras familias irán todos. Pues, su madre envió la lista y en ella Dani confirmó su asistencia.

_ Wow. — Leo hizo una mueca de burla y apretó sus labios.

_ No te rías.

_ No me he reído, ni siquiera me he movido.

EN ESTA VIDA SI...                                             Final alternativoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora