► KR: No. 01

721 48 0
                                    

Anexo 1/2

Uno de los miembros estrella de los Ghosts. El sargento sin duda era un hombre bastante atractivo, por lo que siempre tenía una que otra mujer soldado detrás de él.

Pero no te importaba, al contrario, te sentías orgullosa de tener un novio físicamente atractivo y que te trataba como una verdadera princesa.

Se conocieron en la academia y empezaron su romance, hasta esa fecha habían llevado un envidiable noviazgo de 5 años.

Y aunque no planearon un embarazo ambos estaban felices y nerviosos, pues serían padres primerizos.

Vivías en una casa con Keegan a las afueras de la ciudad, y aunque se ausentaba todo el día por asuntos del trabajo jamás llegaba tarde al anochecer. Se encargaba de mimarte y darte todo el amor que durante el día no podía.

Aunque estabas nerviosa por el bebé en camino jamás te sentías sola por el amor de tu novio. No necesitabas más que sentir el afecto del padre de tu criatura.

A veces te sentías culpable por no poder controlar tus hormonas. No sabías por qué reaccionabas así pero habían noches en las que cuando él se acercaba e intentaba besarte o abrazarte solo lo alejabas.

Él siempre intentó entenderte, pues sabía lo difícil que estaba siendo para ti, pero desde esa noche todo empezó a cambiar.

Una vez más llegó del trabajo, tú ya estabas en cama para entonces. Tomó su cena y un baño para ir al lado de su mujer.

— Cariño... Te he extrañado. — Murmuró cerca de tu oído y sus manos empezaron a viajar a tu cintura.

Después de todo era un hombre que quería tener sexo con su mujer, que deseaba a su chica.

Tenía casi 5 meses sin tocarte.

Pero cuando apretó tus pechos chillaste del dolor, a lo que él se alejó bastante rápido.

Amor, lo siento. ¿Te lastime? ¿Te duele?

No, solo.. un poquito. Es que están muy sensibles últimamente.

— ¿Hay alguna forma en la que pueda ayudarte? Tal vez puedo hacerte sentir mejor. — Él estaba siento provocativo

No hace falta, solo estoy cansada ¿Si?

Entiendo.

Otro rechazo.

Se acomodó en la cama para arroparse, de espaldas a ti. Se rindió.

No querías lastimarlo, solo te sentías indispuesta.

Te acercaste y lo abrazaste por la espalda.

Cielo ¿Estás molesto conmigo?

No es eso _________, tú no hiciste nada malo.

Lo siento, es solo por el bebé.

Solo asintió, en silencio.

No sabías qué estaba mal, pero definitivamente notaste su cambio.

Llegaba tarde y ebrio, se quedaba más tiempo en el trabajo y sentías que hacía lo posible para no estar en casa.

Te lamentabas pensando que si hubieses aceptado acostarte con él esa noche tal vez las cosas no serían así.

Tal vez se sentía herido.

Y en parte era cierto, se sentía rechazado e indeseado por su novia.

Keegan salía a bares con sus compañeros después del trabajo. No quería admitirlo pero le gustaba ver las hermosas mujeres que allí asistían.

Y aunque tuviera una erección por las provocaciones jamás cedía a nada carnal con ninguna de ellas.

Sentía el remordimiento de excitarse teniendo una mujer en casa, pero no podía evitarlo.

Después de todo era hombre y tenía necesidades también, pero no le sería infiel a ella.

Dejó caer su vaso al ver la hora, se supone que ese día tenían cita con la ginecóloga de __________, lo olvidó por completo.

Condujo lo más rápido que pudo a casa pero para cuando llegó las luces estaban apagadas. Cuando entró al cuarto te vio acostada y luego escuchó tu voz.

Tarde.

Lo sé amor, lo siento tanto, me distraje.

Estuviste bebiendo ¿cierto? — Sin respuesta. — Lo sabía.

Te pusiste de pie y él pudo notar tus lágrimas, sabía que estabas decepcionada.

¡Te fuiste a beber otra vez sabiendo que te estaba esperando! Te olvidaste de tu compromiso conmigo, con tu hijo.

No tienes idea de cuando lo lamento.

¡Eso es lo único que sabes decir!

Joder pero ¿Qué carajos quieres que haga? El alcohol lo inclinaba a decir cosas que tal vez pensaba pero que no quería decir. — No eres la única que está estresada ahora, yo también lo estoy ¿Qué quieres de mí?

Que estés presente Keegan, siento que estoy llevando este embarazo sola. ¿Que es lo que te pasa? Estás tan raro y a veces te juro que siento que ya no me amas.

No empieces con tus dramas __________, me duele la cabeza.

No estaba dispuesto a discutir y prefirió irse a otra habitación. Eso te dolió, lloraste sintiéndote por primera vez sola en medio de la noche.

Tu novio se estaba volviendo un desconocido para ti.

Tu única compañía era el bebé en tu vientre y la almohada que abrazabas para intentar consolarte a ti misma.

One Shots | COD Donde viven las historias. Descúbrelo ahora