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-¿Necesitas ayuda? -pregunte al ver como la silla de ruedas se quedaba atascada en rocas-

-Gracias, pero yo puedo -Sonrio Kang-ho-

Mierda como me encanta verte sonreir, cada vez que el sonreia era como un rayo de sol, sus hermosos hoyuelos, y sus labios rosados curvados en una perfecta sonrisa, llená de inocencia y armonia, justo como la de un niño. Lo que ha pasado estas semanas, es prácticamente que Kang-ho pudo comenzar a moverse, tanto que ya puede utilizar su silla de ruedas, los habitantes del pueblo de Joungduri ya saben sobre el "secreto" que prácticamente es que Kang-ho vivia aqui. 

-Si tu lo dices -sonrei mientras lo miraba- 

El asintio de nuevo, con una brillante sonrisa, mientras retrocedia en su silla de ruedas, y desatascaba la rueda, pude ver como cada pequeño logro era importante, me sentia tan orgullosa cada que lograba algo nuevo, me sentia tan feliz de poder recuperar a mi Kang-ho, aunque llevara tiempo, estaba dispuesta a esperar lo necesario, por el, por mi, por nosotros..

-¿Mamá, puedo ir a jugar  con mis amigos? -pregunto mientras señalaba a dos pequeños, de no más de cinco o siete años -

-Ve cariño, pero ten cuidado -sonrio ella-

Me quede observando a Kang-ho mientras se alejaba, con una hermosa sonrisa, se sentia tan irreal por fin verlo dejar su faceta de "F*ck boy" o "Señor sin sentimientos"  aunque no fuera en la situación que me gustaria, estaba feliz de poder verlo asi de radiante. Me quede observando como los niños corrian al rededor de el, y reian los tres juntos... 

¿Estoy viendo mal, o se parecen mucho los niños a el?

𝑼𝒏𝒕𝒐𝒖𝒄𝒉𝒂𝒃𝒍𝒆 -𝑪𝒉𝒐𝒊 𝑲𝒂𝒏𝒈 𝑯𝒐-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora