4🎸: Secretos

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Idiota.

¿Qué quiere? ¿Volverme loca?

Suena el timbre que indica el final de la última clase y aun conservo sus palabras arrogantes atrincheradas en mi cabeza.

Salgo por el pasillo con la multitud de chicos a mi alrededor. Por suerte, ninguno es Luke, porque la furia no ha hecho más que acumularse con el paso de las horas. Sin embargo, entre la avalancha de estudiantes hay una cabeza en particular asomándose.

Rápidamente, intenta llegar a mí.

Es el chico moreno, el bajista. Calum.

—Hola —sonríe, tímido—. ¿Vas sola a casa?

Es la primera vez que hablamos. Anteriormente siempre hay terceros a nuestro alrededor. Recuerdo la primera vez que lo vi: se reía de mí junto a Ashton y el pálido... Michael.

—Sí —confieso—, está cerca, después de todo. Mamá me sugirió regresar con Luke, pero no lo veo posible.

—¿Ya lo conoce? —pregunta, sorprendido.

—Sí, me asignaron un tutor de física en mi primer día. ¿Sabes qué es lo peor?

—¿Ya eso no es lo suficientemente malo?

Lo miro conteniendo una pequeña risa.

—Lo peor de todo es Luke —confieso—. Él es mi tutor en física, no sé cómo llamarle. También es mi vecino.

—Ah, por eso tu mamá lo conoce —caminamos a la par—. ¿Vives en el piso décimo?

Asiento.

—Yo en el segundo—revela—. Podemos tomar el mismo camino a casa, ¿no?

Accedo, dudosa. No porque alguien como Calum me genere desconfianza, mas bien, es otro chico el que lo hace.

—¿No vendrá? —pregunto.

—¿No vendrá quien? —arruga el entrecejo.

—El —digo y entredientes mascullo:—. Luke.

—Ah —balbucea—, de hecho, sí... debería esperarlo.

—Prefiero irme por mi cuenta —anticipo, intentando ser amable—. En serio quiero aceptar tu invitación, pero... no sé cuál es su problema, y sea cual sea, no voy a soportarlo.

—Hailey, pero... —hace un ademán para que me detenga, y me observa confundido—. ¿No se disculpó?

Me veo sin saber qué decir. Después de todo, lo hizo... pero el modo en que lo hizo me hace entender que podría hacer lo mismo una y otra vez. No siente remordimiento o vergüenza.

Sencillamente, me desprecia.

—Lo hizo, pero...

—Dale una oportunidad —pide.

Parece que todos dicen eso. Bueno, solo él y Ashton. No veo porqué tendría que hacerlo, no intenta, ni quiere merecerlo. ¿De qué sirve si mis esfuerzos resultan en vano?

—Creo que él es el que tiene que darme una oportunidad a mí —le aclaro—. Nos vemos el próximo lunes, Calum. 

***

Llego al apartamento 145, del décimo piso, sin aliento. Contemplo la puerta del lugar donde vivo. Mi casa ahora.

Observo el espacio y sigue siendo desconocido para mí. Ahora mismo, parece que vivo en el cuerpo de otra persona, no reconozco a la persona que está de pie aquí. Pero la realidad, es que dentro de ese cuerpo estoy yo. Sigo aquí.

Perdida en la realidad - (5SOS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora