Capítulo 17

1.2K 139 4
                                    


— Vale ahora mismo me siento una rompe matrimonios. Me siento dentro de una novela mexicana donde llega la arpía alias "la amante" que de por casualidad es guapa y el esposo anda jugando una partida al pin pon, primero le choca a una pala y luego a la otra. Pero en este caso las palas somos la esposa, que es un encanto de mujer y esta buenisima, y yo. ¿O yo soy la pelota y ellos dos las palas? Es decir, porque soy yo la que esta con los dos ¿Me entiendes?. — Le digo a Bella quien esta sentada encima de la mesa de mi cocina entretenida con una cuchara.

— Ojalá entenderte. — La miro con el ceño fruncido y ella mantiene la mirada baja.

— Vale, llevas días rara, dispara.

—¿Qué? — Responde alzando su vista— ¿A qué te refieres?

— "¿A qui ti rifieris? " Vamos ya Swan a mi no me tomes por tonta, ¿a quién hay que pegarle? — Ella sonríe ligeramente por unos segundos hasta que vuelve a la misma expresion seria.

— Es Jacob, llevamos un tiempo hablando, pero hay veces en las que desaparece sin ninguna explicación y después vuelve a aparecer como si nada. No lo entiendo y estoy muy confundida con lo que tenemos, o no tenemos o yo que se. — Me responde caminando de un lado hacia el otro.

— ¿Y has hablado con él? — Bella me mira y se sonroja.

— No...

— Yo flipo contigo. —Digo riéndome mientras me cepillo el pelo hacia atrás. — Cuando quieres eres una intensita para descubrir las cosas por tu cuenta, y ahora con tu chico te haces la tonta...Impresionante.

— No es mi chico. — Dice mientras recoge sus cosas. — Pero tienes razón, tengo que descubrir que esta pasando.

— ¿Y que se supone que vas a hacer?.

— Lo voy a espiar.

— ¡Oye no era eso a lo que me refería! — Digo mientras la sigo hasta la entrada.

— ¡Gracias por todo mañana nos vemos! ¡Ah! Y por cierto, tu eres la pelota. — Dice esto ultimo antes de arrancar el coche y desaparecer por la carretera.

— Esta cabrona...

—¿ A qué se refiere con eso?. — Me sobresalto al sentir el fresco aliento en mi nuca.

— ¿Tu eres medio bobo verdad? — Emmett se ríe ante mi expresión y yo viro los ojos mientras subo las escaleras de mi casa con él detrás.

— ¡Oye! ¿A dónde vas?

— A bañarme ¿Por qué? ¿Me quieres acompañar?. — Le digo mientras le sonrío peligrosamente cerca de sus labios.

Veo cómo se los remoja y con rápidez me empuja contra la pared y me agarra por las caderas haciendo una ligera fricción de su intimidad con mi monte de venus, escapandose así un pequeño gemido de anticipación por mi parte.

— No juegues a algo que no sabes si vas a terminar. — Me dice Emmett con sus ojos oscurecidos mientras se remoja el labio inferior.

—¿Quién lo dice?.

—¿Jugando sin mi? No compartir no es de guapos Osito.

— Hola Rose. — La abrazo cuando Emmett deja que me separe de la pared.

— Puedo oler tu "pequeño problema" desde afuera Adhara, y no me voy a poder contener más,  entra al baño, yo te llevo la ropa. — Dice ésta sin mirarme a los ojos. La obedezco y escucho a Emmett quejandose y a Rose susurrando algo que no logro escuchar.

𝚅𝙰𝙽 𝙶𝙾𝙶𝙷 | Cullen'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora