To Sweet

Capitulo 5

A Louis le dolían los dedos de las manos a causa del frío intenso que azotaba la ciudad.

A pesar de que el calefactor en la oficina de Harry estuviera encendido al máximo, no bastaba para que el cuerpo de omega de Louis entrara en calor. El viento helado se colaba por las rendijas de las ventanas, haciendo que cada rincón de la estancia pareciera impregnado de un frío persistente.

"Traje nuevos diseños para el desfile de la semana de la moda," dijo Louis, con un leve temblor en la voz, cuando vio a Harry entrar a su oficina después de terminar una junta. El aire cálido que acompañaba a Harry al abrir la puerta era un contraste reconfortante, pero no suficiente para disipar el frío que sentía Louis.

"Bebé, estás muy pálido, ¿te sientes bien?" Harry se acercó con preocupación en los ojos, acariciando tiernamente las mejillas del menor. Louis se acurrucó contra sus cálidas palmas, buscando consuelo en su toque.

"Adoro el frío, pero me estoy congelando ahora mismo," respondió Louis con un puchero que Harry se contuvo de besar, aunque la tentación era grande.

"Ven." Harry lo tomó suavemente del brazo y lo llevó hasta el sofá, que estaba estratégicamente colocado cerca del calefactor. Harry se sentó en el centro y abrió las piernas, invitando a Louis a acomodarse.

Louis sonrió y se sentó en medio de ellas, con su espalda apoyada en el pecho cálido y fuerte de Harry. La sensación del cuerpo de Harry presionado contra él le hizo sentirse envuelto en un manto de calidez y seguridad que no había sentido en todo el día.

Harry apoyó su barbilla en el hombro de Louis, respirando suavemente cerca de su oído. Louis abrió su cuaderno de bocetos, sus manos aún un poco temblorosas.

Los brazos de Harry rodearon el estómago de Louis, proporcionándole una capa adicional de calor.

"Muéstrame tus bocetos," murmuró Harry en el oído de Louis, su aliento cálido enviando escalofríos placenteros por la columna del menor. "Y yo te abrazaré."

Louis nunca se había sentido tan cálido en su vida como en esa mañana.

.........

Al medio día, la oficina de Harry se transformaba en un oasis de tranquilidad y sabor.

Desde hace dos meses, cuando Louis comenzó su pasantía, este momento se había convertido en una tradición sagrada.

Harry y Louis, un omega se encontraban frente a frente, compartiendo el almuerzo que Jean, el padre de Louis y renombrado chef gourmet, preparaba con esmero para ellos.

El aroma del platillo recién preparado llenaba la habitación, y Harry no pudo evitar soltar una exclamación de asombro después del primer bocado. "Joder, tu papá crea manjares de los dioses", dijo, su voz cargada de admiración y placer genuino.

Harry era un hedonista por naturaleza.

Louis sonrió, complacido por el cumplido hacia su padre. "Y eso que aún no has probado su mejor creación", replicó, sus ojos brillando con una chispa traviesa.

La insinuación no pasó desapercibida para Harry, quien alzó una ceja y lo miró con un brillo de picardía en sus ojos verdes.

A Louis siempre le gusta cuando Harry lo mira así.

"Eres descarado, bebé. Me gusta", respondió Harry con una risa profunda que resonó en la pequeña oficina.

Sus ojos se achinaron, sus hoyuelos se marcaron y su expresión se iluminó, haciendo que Louis sintiera un vuelco en el corazón.

En ese instante, Louis supo que estaba perdido.

Había caído.

...............

Harry observó detenidamente hasta asegurarse de que Louis había entrado a su casa con seguridad antes de arrancar el coche y marcharse. Con un suspiro de alivio, sacó su móvil y llamó a su mejor amigo.

"Habla la secretaria del señor Nigel, el señor no puede atenderlo en este momento, llame más tarde." La voz juguetona de Sindy, la hija de su amigo, resonó en la línea.

"Sindy, cariño, dale el teléfono a tu papá o le diré a tu papá Adam que estás mintiendo de nuevo," respondió Harry con una risa estruendosa cuando escuchó el bufido de su sobrina postiza al otro lado de la línea.

Un minuto más tarde, Nigel contestó con su tono característicamente despreocupado. "Harold, hoy no tengo espacio para esconder un cuerpo, pero si es otra cosa, ¿en qué puedo ayudarte?"

Harry salió de la carretera y estacionó a un lado. "Estoy yendo a tu casa, necesito hablar con Adam..."

"¿Por qué quieres hablar con mi esposo?" Nigel gruñó, posesivo, haciendo que Harry rodara los ojos.

"Adam era mi amigo antes que tú, lo necesito para... cosas de omega," contestó Harry, carraspeando y sintiendo cómo sus mejillas se sonrojaban sin su permiso.

"Oh, ¿es por el omega de tu oficina que te gusta-?" Nigel no pudo terminar la frase porque Harry colgó de inmediato, sintiendo una mezcla de vergüenza y enojo.

Sin embargo, Nigel no se dio por vencido tan fácilmente. En cuestión de segundos, Harry comenzó a recibir una ráfaga de mensajes burlones que, en lugar de ofenderlo, lo hicieron reír a carcajadas.

...........

Al llegar a la casa de Nigel y Adam, Harry fue recibido con un cálido abrazo de Adam, seguido por un golpe amistoso de Nigel y un alborotado salto de Sindy.

"¡Tío!" gritó la niña de seis años, lanzándose a los brazos de Harry con entusiasmo.

"¡Prinţesă! ¡Estás enorme!" exclamó Harry, encantado, dándole un beso en la mejilla. La pequeña cachorra se aferró a su cuello, pero pronto frunció su pequeña nariz al captar un aroma extraño.

"Hueles a omega, ¿tienes novio?" preguntó Sindy con sus enormes ojos azules muy abiertos, mientras Nigel soltaba una risa burlona detrás de ellos.

"Quiere, pero tu tío es un tonto que no quiere decirle a ese omega que le gusta," explicó Nigel a su hija, y ella se trasladó a sus brazos con una risita.

Harry, sintiendo sus mejillas enrojecer, le dio un golpe a Nigel en la cabeza. Nigel intentó devolvérselo, pero Adam entró en la sala seguido por el mayordomo. "No peleen frente a la niña," los regañó el omega, sentándose en las piernas de su alfa cuando Sindy se escabulló con el celular de su tío y se fue a su habitación.

"Nigel comenzó," acusó Harry como un niño pequeño, a lo que Nigel le sacó la lengua.

Adam rodó los ojos y suspiró. "Alfas," murmuró con resignación. "Harry, ¿para qué quieres hablar conmigo?"

Harry se puso serio y bebió un sorbo del whisky que el mayordomo le sirvió. "Como sabes... conocí a un chico hace un tiempo. Ese chico trabaja conmigo y me gusta... mucho."

"Estás enamorado de él," señaló Adam con perspicacia. "No es una pregunta, es una afirmación."

Nigel sonrió orgulloso de su inteligente esposo, mientras las orejas de Harry enrojecían aún más.

"Sí... y yo..." comenzó Harry, inseguro.

"Quieres cortejarlo pero no sabes cómo," completó Adam, y Harry asintió efusivamente.

"Por favor, ayúdame," imploró Harry. "Louis es una de las personas más hermosas y brillantes que conozco... yo... estoy completamente perdido por él. Quiero que sea mi omega."

...............

Hellooooooooooooo

Cómo estás?

Te gustó el capítulo?

Harry es el hijo adoptivo de su pareja de amigos 🤣

El bebé de Adam y Nigel ya creció, creen que conseguirá el corazón de Louis?