───Oh Duxo . . . veo que estás solo, . . .¿no quieres jugar a aún jueguito~? , vamos, será divertido~ . . .
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─── ¡AH! ¡YA-YA DESPERTÉ, ¡PERDÓN!───Al parecer estaba hiperventilado, se había despertado de golpe sudando en frío.
Era casi la madrugada, las agujas del reloj apenas rozaban las 4:56 AM cuando un agudo grito rasgó el silencio de la habitación.
Duxo, sobresaltado y visiblemente alterado, había despertado de golpe, sacudiendo la tranquilidad nocturna. El sonido no solo había sacado a Duxo de su sueño, sino que también había alertado al castaño, quien, con ojos entrecerrados por el sueño, intentaba comprender lo que ocurría en la habitación.
Aquino giró hacia Duxo, cuya figura temblorosa se recostaba en la pared que estaba pegada a la cama. El joven estaba aferrado a las mantas con tal fuerza que parecía querer fundirse con ellas, como si buscara protección contra algo invisible pero palpable en el aire.
Aquino sintió un escalofrío recorrerle la espalda al ver la expresión de temor en el rostro de su compañero, preguntándose qué podía haber perturbado su sueño de esa manera tan intensa.
─── . . .¡Duxo!. . .¿¡Como estas?! ¿¡Te sientes bien?! ¿Te duele algo?─── A pesar del sobresalto y la hora inusual, Aquino sintió un caluroso alivio al ver a Duxo despierto y consciente.
El temor inicial comenzó a ceder ante la alegría de tener a su amigo a salvo y presente en ese momento de incertidumbre. Sin importarle la madrugada o cualquier incomodidad, una sonrisa se dibujó en el rostro de Aquino mientras se acercaba con cautela hacia su acompañante, dispuesto a ofrecerle apoyo.
Duxo, aún en estado de shock profundo, parecía no reconocer a Aquino, perdido en los recuerdos dolorosos que asaltaban su mente. Imágenes de un pasado traumático, vivencias que habían marcado su infancia, resurgían con una intensidad avasalladora. La inocencia rota, la pérdida que aún pesaba como una losa en su corazón, todo ello se reflejaba en los ojos lilas mientras luchaba por procesar el presente y el pasado que ahora se mezclaban de manera tan inesperada en medio de la madrugada.
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˜"*°•.Mi Maldición; Ojos lilas𓂀.•°*"˜
Random"¿𝘊ó𝘮𝘰 𝘢𝘭𝘨𝘰 𝘵𝘢𝘯 𝘩𝘦𝘳𝘮𝘰𝘴𝘰 𝘦 𝘪𝘯𝘤𝘭𝘶𝘴𝘰 ú𝘯𝘪𝘤𝘰 𝘱𝘶𝘦𝘥𝘦 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘢𝘳 𝘢 𝘴𝘦𝘳 𝘵𝘶 𝘮𝘢𝘭𝘥𝘪𝘤𝘪ó𝘯?". . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Edad de los protas: Aquino: 16 Duxo: 15 ...