Principio del Fin

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Renuncia de derechos, ninguno de los personajes utilizados aquí son de mi propiedad.

-¡Mamá! ¡Papá! -una voz femenina exageradamente aguda chillo, acudiendo a los brazos de su madre quién estaba acompañada de su pareja.

-¿Ocurre algo Ruby? -pregunto Goku levemente preocupado, aunque normalmente desde que Ruby empezó a hablar y caminar, simplemente se les abalanzaba.

-¡No pasa nada! ¡Solo quería mimos!

Tres largos años transcurrieron desde que visitó a su madre. Ruby y Aqua dejaron de ser los pequeños bebés que eran en aquellos entonces y por supuesto, la pareja seguía en plena armonía.

Desde entonces, también ocurrieron múltiples eventos, como el debut de Ai en diferentes carreras, similar a Goku. Ambos no eran ya solo simples Idol.

Incluso Aquamarine quien pese a su temprana edad parecía tener potencial como actor, ganó un papel fundamental en una de las escenas de película en las que aparecía Ai.

Ruby abrazo la pierna de su madre cariñosamente y enterró su cara entre los muslos de la misma, mientras que hay acariciaba suavemente su pelo rojizo.

-¿La siguiente semana es nuestro concierto? -Goku miró de reojo como Ruby disfrutaba del trato de Ai pero ahora solamente podía quedarse callado. -El presidente está muy ansioso.

-¡Bueno es que había sido su sueño desde hace mucho hacer un concierto en un estadio tan famoso! -clamo Ai con su éxtasis común y sonrisa tranquila viendo ahora el perfil de su pareja.

Goku recordaba que cuando el presidente se ponía ebrio era mucho más sincero de lo común. Si, era verdad, si lo pensaba con más profundidad recordaba todas las veces que alardeaba que algún día estaría en esos escenarios.

Enhorabuena por él, o por ellos en realidad, todo el grupo sería el que estaría ahí arriba brillando en la cúspide. Moria de ganas de ver la cara de sus familiares al verle.

Hablando de los últimos, recurrentemente habla con ellos, los visito otras ocasiones aunque solo fueron por lapsos pequeños del día y sin la Hoshino, puesto que también debía encargarse de asuntos personales.

Pero con la compañía de sus hijos ya era más que suficiente.

Creía que había madurado mucho más después de vivir con una familia cada día de su vida, los cuidaba a los tres y ayudaba a Ai a 'adiestrar' a los gemelos.

La idea sonaba extraña si hubiera hablado del Goku de hace años, pero ahora, incluso él enseñaba cosas a sus hijos fuera de las peleas o el entrenamiento.

Tampoco lo había dejado de lado, cada que tenía tiempo entrenaba y mantenía su cuerpo en la mejor forma posible, tal como le gustaba; no solo a él le gustaba.

-Voy tenemos el día libre. ¿Por qué no vamos a pasear? -Goku pregunto a lo que Ai llevo su dedo índice a la boca como si pensara la idea.

-Cuando dices eso es porque solo quieres ir a comer. -dijo Ai en una sonrisa que logró hacer sacudir la columna vertebral de Goku, no era una de esas sonrisas tétricas, pero el hecho de que lo lea tan bien le daba miedo.

-N-No... No es eso...

-¡Mi papá es muy fácil de leer! -chillo Ruby que ahora había dejado de enterrar su cara en los muslos de Ai para ver al joven pelipunta quien le sonrió nerviosamente. Por alguna razón, Ruby tenía la cara roja.

-¿De verdad no tienen nada que hacer? Prepararse para el espectáculo de la semana que viene, arreglar sus agendas o ir a clases. -hablo Aquamarine pareciendo el manager de ambos, los cuales con cada idea que el niño daba una gota de sudor cada vez más grande se formaba en la nuca de ambos.

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⏰ Última actualización: Jul 10 ⏰

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