08 ✰ LA CARTA DE LIBERACION A NOAH 🌱

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Andrea aún seguía consternada por las palabras que Mel le había transmitido, pero no podía quedarse parada en el lugar; al menos debía ir a disculparse.

Andrea bajó escalón por escalón de aquel largo palacio vacío, pues todos los elfos que allí yacían escaparon tras la muerte de su preciado rey.

— Noah. — Afirma Andrea aún acomodándose en posición frente al de hebras oscuras.

— Tranquila Andrea, no necesito que me digas nada más, las acompañaré hasta que la próxima carta te diga cómo será mi manera de liberación. — La voz ronca y fría de Noah resuena en los oídos de la de rojas hebras.

— Ese no es el problema, inmaduro. — Afirma Andrea queriendo llamar un poco la atención del chico.

— ¿Entonces? — Noah toma una posición de enfrentamiento de mirada frente a la sagrada ninfa.

— Andrea ya tenía un chico que le provocaba mariposas en el estómago, Noah; en su mente solo está disponible ese chico. — Mel interrumpe la conversación con un tono sabio.

— ¡Gracias! — Andrea, enojada de que Mel pudiera leer sus pensamientos, suelta un agradecimiento irónico.

— Sin embargo, ese chico en estos momentos, por lo que veo con mis ojos hacia el mundo exterior, ha fallecido. — Mel mira con una mirada preocupante a la de hebras rojas y oscuros ojos.-

Andrea no habló, tampoco lloró; su corazón se partía en mil pedazos. No podía sentir más, puesto que el chico nunca le dio oportunidad como novios, pero ella sentía esa conexión.

No pudo evitarlo, una lágrima comenzó a salir por sus ojos mientras miraba el suelo y su cabellera cubría toda expresión de shock en su cara.

— Lo lamento, Andrea. — Noah intenta ser amable pero ella le responde con una cachetada en la cara.

— ¡Ni siquiera se te ocurra tocarme, Noah Lexus! — Andrea grita con todas sus fuerzas.

Noah estaba enojado y, con la lástima de su corazón, hizo el hechizo y la sentó de golpe en el suelo.

— No es mi culpa que tu novio principito de ciudad se haya muerto. Los humanos no aprecian su vida; la desperdician con drogas, alcohol y muchas sustancias inéditas. — Noah mira firmemente a los ojos oscuros de Andrea.

— Andrea, siento cosas bonitas por ti, pero eso no implica que deba aguantar tus tonterías. Las cosas aquí funcionan diferente. — Noah se aleja de donde dejó a Andrea.

Andrea estaba aún más en shock; Noah había conseguido sentarla y ponerle orden. Por alguna rara razón, eso le pareció atractivo; ver los ojos oscuros de Noah directamente le pareció algo erótico y sincero de su parte.

Acto seguido a esto, Andrea, ayudada por Mel, se levantó y siguieron con su camino a encontrar el Monte Pírico.

Caminaron durante una hora y media en silencio; nadie opinaría nada al respecto. Estaban en medio de un bosque cuando de la nada una carta aparece en el camino de la elegida.

[16: Querida Elegida,
Elegida, estás a punto de enfrentarte a un rival super difícil, tu cuarto guardián nos ha traicionado, no quiere que seas nuestra sagrada ninfa, él quiere el poder de los dioses para su beneficio propio, tienes que tener mucho cuidado con él.]

— ¿Mi Cuarto Guardián? — Andrea busca respuestas en la hechicera y el joven caballero.

— Así que estás aquí... — Noah comienza a llamar a alguien de la nada.

🌱 El Camino de las 100 Cartas || Español || [ DORIAN ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora