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Al terminar de cenar, Mia llevo todo a la cocina,

Miguel: Oye

Mia: ¿Qué?

Miguel: No podemos dejar este vino,

Mia: Solo te dije que una copa,

Miguel: Una no es ninguna,

Mia: Acaso quieres emborracharme

Miguel: Con vino, sale otra copa para cada quien,

Mia: Bueno,

Estaban en el sofá sentados,

Miguel: Te agrado la velada improvisada

Mia: Si, ¿y a ti?

Miguel: También, hacia mucho que no bailaba,

Mia: Es un buen ejercicio,

Miguel: Para que mejores tu condición

Mia: Si,

Miguel: Ya me voy a acabar mi vino

Mia: Yo igual

Miguel: Un brindis,

Mia: Si, yo lo hago,

Miguel: Adelante

Mia: Porque tus estudios van a salir bien, y recuperaras la vista, y a la mujer que amas,

Miguel: Te parece si lo dejamos en lo de que los exámenes salieran bien y recuperara mi vista,

Mia: Pero,

Miguel: Salud

Mia: Salud,

Miguel: Sabías que este es sofá cama,

Mia: ¿Cómo?

Miguel: Si,

Miguel: Por aquí tiene una palanca para convertirlo,

En unos segundos,

Mia: Es verdad,

Miguel: Es muy cómodo,

Mia: En serio

Miguel: Si, algunas noches prefería dormir aquí en lugar de mi cuarto,

Mia: Es broma

Miguel: No,

Los dos se acostaron, en eso una canción,

Mia: Miguel,

Miguel: ¿Qué?

Mia: Estás llorando,

Miguel: Esa canción la escuchamos el día que le pedí matrimonio,

Mia: La quito

Miguel: No,

Mia: ¿Qué hago?

Miguel: Que tal si me abrazas,

Mia: Bueno,

Ninguno de los dos supo cuando se quedo dormido, fueron muchas emociones, Roberta no había disfrutado para nada la velada, casi obligo a Diego a que regresaran a su casa,

Roberta: No me debí ir,

Diego: Lo que haya pasado fue entre ellos dos,

Roberta: Aún así,

Diego: Lo más seguro es que ya se hayan arreglado

Roberta: Mia estaba muy mal, hasta me dijo que se regresaba a México

Diego: Pues qué le hizo

Roberta: Ni idea, yo me estaba bañando, salí por el golpe que dio Mia al cerrar la puerta,

ojos del almaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora