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Sabrina se puso pálida,
Miguel: ¿Te sucede algo Sabrina?
Sabrina: Es broma,
Mia: No, Miguel y yo nos casamos ahora que viajamos a Oaxaca
Sabrina: Pero
Mia: Sabrina tengo clases,
Miguel: Y yo me tengo que ir a trabajar,
Miguel le dio un beso a Mia,
Miguel: Cuídate mucho mi amor
Mia: Tú también, vienes por mi
Miguel: Desde luego,
Miguel ya se iba,
Miguel: Sabrina, no se te ocurra hacerle algo a mi esposa, porque no respondo
Sabrina: Me estás amenazando
Miguel: No, es una simple advertencia,
Mia se fue a su clase, adentro estaba Roberta
Roberta: Hola cuñada
Mia: Hola, ¿cómo estás?
Roberta: Bien, pero no mejor que tú,
Mia: Soy muy feliz,
Roberta: Se te nota, traes una cara de enamorada
Mia: Y lo estoy
Roberta: Cuidado ahí viene miss simpatía
Mia: Miguel y yo le dimos la buena noticia
Roberta: Se me adelantaron, pero,
Sabrina estaba buscando un lugar para sentarse, y,
Roberta: Hola Sabrina
Sabrina: Roberta, tú saludándome,
Roberta: Ya conoces a mi cuñada, Miguel y ella se casaron
Sabrina: Si ya sé,
Roberta: Yo que quería darte la primicia
Mia: Va a empezar la clase
Roberta y Mia se sentaron muertas de la risa, en cuanto terminaron sus clases, se fueron a
comer algo a la cafetería,
Roberta: ¿Qué tal la vida de casada?
Mia: Maravillosa
Roberta: Se ve,
Mia: Soy tan feliz
Roberta: Cuidado ahí viene un cuervo,

Mia volteo en la cafetería estaba entrando Joaquín, él venía hacia donde estaban ellas,
Joaquín: Hola
Mia no le respondió,
Roberta: Hola Joaquín
Joaquín: Hola Roberta, parece que a la prometida de tu hermano le comieron la lengua
Roberta: No a su prometida, puede ser que a su esposa
Joaquín: ¿Cómo?
Roberta: Si, ella y mi hermano se casaron,
Joaquín: Es broma
Roberta: No, pero me imagino que tendremos que sacar copia de su acta de matrimonio para
que lo crean,
El volteo a ver a Mia, ella solo alzo su mano para que viera su argolla de matrimonio, él se dio
la media vuelta,
Roberta: ¿Por qué no le hablaste?
Mia: Se lo prometí a mi esposo
Roberta: ¿Qué le prometiste a mi hermano?
Mia: Aunque él me hablara, yo ni siquiera le dirigiría la palabra
Roberta: Yo estoy de testigo que lo cumpliste, pero al menos para correrlo le tendrás que dirigir
la palabra
Mia: Se cansara al igual que Sabrina
Roberta: Siento que darán guerra
Mia: Puede que si, pero amo tanto a Miguel que no dejare que este par arruine nuestro amor
Roberta: Así se habla cuñada
En eso en la cafetería entro,
Mia: Ahí viene la tal Sol
Sol la vio y se acerco,
Sol: Hola Roberta
Roberta: Hola
Sol: Sabes que Diego y yo haremos un proyecto juntos
Roberta: Y tú sabes que él y yo nos vamos a casar
Sol: En mayo
Roberta: Así es querida
Sol: Faltan como cuatro meses para eso, puedo cambiarlo
Roberta: Lo amo Sol y él me amaba a mi, eso lo tengo bien claro y peleare con todo por el
hombre que amo,
Sol se dio la media vuelta,
Mia: Ok, tú y yo nos tendremos que hacer un lavado de cerebro mutuamente
Roberta: ¿Por qué Mia?
Mia: Tanto Sol como Sabrina nos fastidiarán un poco

Roberta: Pues si
Mia: Y tú y yo no debemos caer en sus juegos
Roberta: No
Mia: Así que te parece si hacemos un pacto
Roberta: A ver eso suena bien
Mia: El pacto es el siguiente, cuando yo vea que la estás regando te pongo un alto y si yo hago
lo mismo
Roberta: Yo te pongo el alto
Mia: Aja,
Roberta: Trato cuñada,
Mia: Nos ayudaremos a cuidar a los hombres que amamos
Roberta: Hecho,
Las dos se fueron a su clase, cuando entraron,
Roberta: Viste quien está ahí
Mia: ¿Qué hace él aquí?
Roberta: No es obvio
Mia: Tú y yo trabajamos juntas,
Roberta: Pero por supuesto, es más yo conozco al profesor
Mia: ¿Cómo?
Roberta: Viejo amigo de mi papá, ven
Las dos se acercaron al profesor que arreglaba sus cosas,
Roberta: Buenas tardes
Martín: Muchachita, así que por fin llegas
Roberta: Es temprano,
Martín: ¿Y tu padre?
Roberta: De viaje,
Martín: Me lo saludas cuando hables con él,
Roberta: Desde luego, mira te quiero presentar a la esposa de mi hermano
Martín: Mucho gusto, Martín, amigo de los papás de tu esposo y tu profesor
Mia: Mucho gusto Mia
Martín: Así que tu hermano cambio de modelo, lo siento linda
Mia: No se preocupe,
Roberta: Martín te puedo pedir un favor
Martín: Si dime
Roberta: Ves al tipo que está ahí,
Martín: No es amigo de tu hermano
Roberta: Examigo de mi hermano,
Martín: Ahh,
Roberta: Es una larga historia, pero había forma que no permitieras que Mia trabajara con él,
Martín: ¿Alguna razón especial?
Roberta: Te la puedo decir terminando la clase
Martín: Es hora de empezar, y no te apures, trabajaran juntas
Roberta: Gracias,

ojos del almaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora