Capítulo 12 : El Club DADA y el crecimiento como persona

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Querido Harry,

también conocido como el prefecto serpiente,

¿te gustaría venir a almorzar con nosotros en tu fin de semana de Hogsmeade en octubre?

Rems es educado. Quería decir: oye, niño, ven a almorzar con tu padrino favorito.

Eres su único padrino.

Exactamente.

¡De todos modos! Avísanos si estás libre y cómo van tus clases.

Escuché que Umbridge es una verdadera idiota.

Un Canuto muy maduro. Un excelente ejemplo para tu ahijado.

¡Oye! ¡Harry me enseña más maldiciones que yo a él!

Nos vemos pronto, espero.

-Remus y Sirius

***

Harry sabía que este era el año de los TIMOS y que sus compañeros estaban estresados ​​por la mayor carga de trabajo, y los ensayos adicionales eran muy agotadores. Sabía que Dumbledore estaba planeando formas de usar a Harry para matar a Voldemort por él. Y sabía que Timmy había regresado y estaba constantemente tratando de entrar en su cabeza, una sensación increíblemente molesta que le causaba un ligero dolor de cabeza cada vez. Pero, ¿en serio?

Harry realmente pensó que este podría ser el mejor año de todos.

No había ningún torneo que ganar, y cada vez que veía a Fred sentía una dolorosa opresión en el pecho, pero lo compensaba evitándolo y encontrando otras cosas que hacer.

Cosas como los entrenamientos de quidditch, con y sin su equipo. Había hablado con Viktor después de que preparó los lugares para su equipo y le pidió consejo sobre cómo convencer a los reclutadores de equipos profesionales para que asistieran a sus partidos este año.

—Eres Harry Potter. Firma con tu nombre claramente—fue el consejo que recibió.

Que es exactamente lo que hizo.

Técnicamente, Susan escribía las cartas (tiene una forma de escribir mucho más profesional) y Harry simplemente firmaba con su nombre y las enviaba con Sevvie. Así que tenía una pequeña esperanza de que al menos un reclutador del equipo tuviera la curiosidad suficiente como para aparecer. Si Viktor pudo convertirse en profesional a los dieciséis, Harry quería hacerlo a los quince.

Harry también pasó mucho tiempo mostrando duelos a los otros Slytherins que acudieron a él una vez que se dieron cuenta de que Umbridge no estaba dispuesta (o, según Snape y Hermione, no era capaz) de mostrarles el hechizo en clase. Realmente no vio el alboroto que todos armaron al respecto, si entendías la teoría, entonces deberías ser capaz de hacer el hechizo. E incluso si no lo hacías, solo necesitabas concentrarte mucho y hacer fuerza.

La magia era tan fácil que eran todos los demás quienes la hacían difícil.

Además, a Harry le gustaba tener dos clases extra cada semana en las que podía trabajar en sus ensayos para otras clases. Ron le había echado un vistazo cuando Harry sacó su texto de Transfiguración durante la segunda clase de Umbridge, pero Umbridge ni siquiera hizo comentarios al respecto.

Ella era otra lameculos más, siempre mencionando lo genial que sería si Harry le contara a Fudge lo buena profesora que era. Él siempre tarareaba evasivamente ante eso, no lo haría gratis y hasta ahora no había nada que Umbridge pudiera ofrecerle.

Expecto Patronum/// Parte 5 De Harry Potter Y Siete Años De Caos. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora