Expecto Patronum/// Parte 5 De Harry Potter Y Siete Años De Caos.

Capítulo 28 : La detención de Trent Bailey

Martes 10 de febrero

-Buenos días niños.

-Buenos días, directora Umbridge -respondió la clase obedientemente.

-Hoy llegaremos al capítulo veinte, no habrá necesidad de hablar -dijo Umbridge con una dulce sonrisa que no engañó a nadie.

-Sí, directora-dijeron.

Trent sacó su libro con tristeza y lo puso sobre su escritorio. Hizo un puchero con su compañera de escritorio, Sapphire, una simpática chica de Gryffindor de su año. Ambos coincidieron en que la clase de Umbridge era absolutamente la peor.

Trent deseaba que Harry enseñara su clase de defensa, sería capaz de enseñarles mucho más que la vieja y malvada Umbridge. Una vez le había susurrado eso a Sapphire y ella le sacó la lengua, aparentemente no le gustaba Harry, lo cual fue la cosa más tonta que Trent escuchó en su vida. Si pudiera crecer y ser quien quisiera, sería Harry.

A veces, les decía a los crédulos alumnos de primer año que eran primos. Se parecían un poco, con el pelo negro y los ojos verdes. Y Trent incluso se había comprado unas gafas iguales a las suyas, salvo que no le permitían usarlas en verano porque eso enfadaba a su madre.

«¡No necesitas gafas, idiota!», gritaba.

Era más fácil si no las usaba, aunque realmente las amaba. Su madre había estado muy estresada desde que recibió la carta de Hogwarts y su padre los dejó. Al principio, su madre dijo que no era su culpa que su padre se fuera, "es solo un tipo malo", decía. "No lo necesitamos". Pero este último verano ella bebía después del trabajo todos los días y lloraba y gritaba y le preguntaba a Trent por qué había arruinado su vida.

Trent pasó gran parte de este último verano con sus amigos muggles una vez que se dio cuenta de que su madre no quería oír nada sobre su vida. Ni siquiera cuando intentó contarle que Harry Potter mató a un dragón con una espada. Ella solo lo miró con enojo y le dijo que Hogwarts sonaba extraño y que la magia "iba en contra de la palabra del Señor". Había sonado como si ella pensara que él era extraño y que iba en contra de la "palabra del Señor" (lo que sea que eso significara), pero él no quería empezar otra pelea con ella, así que simplemente se quedó callado.

No se molestó en intentar decirle lo maravilloso que era Hogwarts, que se sentía más como en casa que su pequeño apartamento en la ciudad. Todavía se sentía como en casa para él, incluso si su hogar ahora estaba lleno de retratos que eructaban, pantanos y fuegos artificiales con forma de dragón que se multiplicaban cuando intentabas desaparecerlos.

Regresar a Hogwarts este año había sido lo mejor de todo. En primer lugar, había sido el padrino de Harry en un duelo, lo que probablemente fue lo más aterrador que había hecho en su vida. Luego, el profesor Flitwick dijo que tenía un talento natural para los encantamientos en su segunda clase de regreso. Y luego, pudo montar la escoba de Harry Potter para las pruebas de quidditch e incluso consiguió un lugar en el equipo.

Y el puesto de buscador de reserva era tan importante como cualquier otro. Eso es lo que Harry le dijo y eso es lo que Trent les dijo a los otros chicos de su año que se rieron de su posición.

Pero lo mejor de todo fue que, cuando el profesor Snape le preguntó por qué no había hecho ninguna de sus tareas de verano, Trent le explicó en voz baja después de clase que sus padres eran muggles. Se sintió terrible cuando admitió que su madre ni siquiera lo llevaría al Callejón Diagon para comprar nuevos útiles este año, insistiendo en que ya era suficiente con que lo dejara ir a una escuela tan poco natural. Incluso cuando intentó decirle lo molesta que se puso su madre cuando mencionó la magia, el profesor Snape no se enojó, le dio una extensión para su ensayo y lo invitó a tomar el té con él. Y todos sabían que al profesor Snape no solía gustarle los estudiantes, así que si estaba invitando a Trent a tomar el té, entonces claramente Trent había hecho algo para impresionarlo.