Una Novia Para Mamá | Rivari ° G!P

Capítulo 18

Caminó entre las gradas con el pequeño Matteo tomado de su mano, se sentó en uno de los bancos vacíos y colocó al niño en sus piernas. Aún no sabía si era buena idea.

Lidia la había llamado esta mañana pidiéndole ver a los niños y no pudo negarse. Después de todo era sábado, ellos tenían el día libre y ella era su tía, los quería y estaba segura de que los niños la echaron de menos. Aún así su hermana, Amairani no estaba de acuerdo y habían discutido por ella.

Le había dicho a Lidia que viniera al partido con Tyler, que viera a los niños jugar y que después se los podían llevar a pasar el dia con ellos, por lo menos hasta las cinco. Después de todo no podía negar que ella nunca se había portado mal, al contrario. Y ahora que se daba cuenta, no le dolía pensar en ella, en la familia de Juan, no le dolía pensar en él. No pudo evitar que una sonrisa se dibujara en su rostro.

-Hola Lid. -Abril se levantó rápidamente saludandola.

-¿Abril? -Lidia estaba parada ante ella, mirándola sorprendida. Estaba cambiada y no solo se refería a su ropa, sino a su rostro, su sonrisa, irradiaba felicidad.

-Tía. -Matteo se lanzó a los brazos de su tía.

-Vaya mira que grande estas. -Lidia estrecho al pequeño entre sus brazos- Eres todo un hombrecito.

-¿Y Tyler? -Abril frunció el ceño.

-Aparcando. -Lidia la miro con una sonrisa- Esto está atestado.

-Sí. -Abril se hizo a un lado para que pasara y se sentara junto a ella.

-Gracias Abril. -Lidia la miro con una sonrisa mientras sostenía al pequeño entre sus brazos- De verdad gracias.

-No hay porque darlas. -Abril sonrió- Eres su tía.

-Estás, distinta. -Lidia la miro curiosa- ¿Feliz?

-Feliz. -Abril repitió la palabra. Comenzaba a pensar que la felicidad no existe, pero puede que esa sea la palabra- Estoy feliz.

-Hola. -Tyler se paró ante ella mirando al niño con cariño.

-Hola Tyler. -Abril se levantó y lo saludo, después se hizo a un lado para que él pasara y se sentara junto a su prometida. Mientras el tomaba asiento ella fijo la vista en el campo de fútbol, donde los niños comenzaban a prepararse y se encontró con la mirada de Samantha puesta en ella. Sonrió levemente y ella le contestó de la misma manera.

-Abril. -Lidia la llamó confundida- ¿Todo bien?

-Sí. -respondió rápidamente y se sentó en el banco de nuevo- ¿Y como van los planes de boda?

-Pues ya tenemos todo listo. -Lidia la miro precavida- ¿Crees que podrás venir?

-No lo sé. -suspiró- Pero no puedo ser la madrina, entiendelo.

-Ya. -Lidia suspiro- Al menos me gustaría que fueras a la boda.

-Ya veré. -Abril no se atrevió a dar una respuesta fija.

-Empieza el partido. -Tyler miraba a sus sobrinos con adoración.

-¡Vamos chicos! -Abril grito colocando sus manos a ambos lados de su boca, como si así logrará mas volumen y ambos la miraron sorprendidos.

¿Dónde había quedado la vieja Abril? ¿Y qué le había ocurrido para cambiar de esa manera?

-Tus artículos, -Lidia hablo mientras miraba el partido- son increíbles, me gustan.

-Seguro que tu hermano no opina lo mismo. -Abril sonrío con ironía.

-No dejes que el se meta en tus asuntos. -Lidia la miró con el ceño fruncido.