Capítulo 11

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Las puertas del ascensor se abrieron y nada más poner un pie fuera, todos los trabajadores posaron la vista en ella. Después los aplausos inundaron la planta al completo.

-Pero ¿Qué? -Abril miró a su alrededor.

-¡Genial! ¡Sencillamente genial! -Adam caminó hacía ella y la estrechó entre sus brazos- ¡Sabía que no me defraudarías! ¡¿Pero esto?! -levantó la revista- ¡Esto es sencillamente maravilloso!.

-¿La revista? -Abril frunció el ceño.

-¡Tu articulo! ¡Es sensacional! -Adam abrió la revista y se lo mostró- ¡Con tan solo el anuncio de él en la portada hemos duplicado la venta y solo llevamos una mañana!.

-No puede ser. -Abril miraba la revista en la mano de su jefe.

-Tenemos mucho que hablar. -Adam la señaló y comenzó a caminar hacía su despacho. Abril le siguió agradeciendo a los compañeros que la felicitaban- Siéntate. -nadamás entrar señaló la silla.

-El Rincón de la Mujer se queda fijo y tú serás su escritora.

-¿Yo sola? -Abril lo miró sorprendida.

-Será tu rincón cariño, El Rincón de la Mujer, por Abril Garza. -Adam dejó la revista sobre la mesa- Abriremos un mail para el rincón, para que te manden sus opiniones y cuenten sus historias. Por supuesto tendrás un sueldo, a parte del tuyo.

-Un sueldo. -Abril trataba de asimilar lo que estaba pasando- ¿De verdad?.

-Tu lo has escrito. -Adam sonrió- ¿No viste lo bueno que es?.

-La verdad. -suspiró- Lo escribí en un momento de cabreo con Juan.

-Pues ahora, que estás tranquila. -Adam tomó la revista y se la dió- Ve a tu despacho y leelo y después ve pensando el artículo de la próxima edición.

Y Abril tomó la revista y se dirigió hacía la puerta.

-Abril. -Adam volvió a llamar su atención- Enhorabuena.

-Gracias. -ella asintió con el ceño fruncido y después se marchó.

Cuando al fin logró quedarse a solas en su despacho, se sentó en el sillón tras su mesa y totalmente relajada, abrió la revista por su artículo.

EL RINCÓN DE LA MUJER

El ideal que busca una mujer.

¿Por qué? Esa es la principal pregunta que toda mujer se hace, cuando descubre que su relación no es real. Que no funciona. Claro que la mayor parte de las veces ellos se han dado cuenta antes. ¿Es que tienen un sexto sentido? Desde luego lo tienen para liarse con la primera tetona poli operada que se les ponga por delante.

¿La relación no funciona? ¿Cómo se supone que puede funcionar si el cerdo de tu esposo se acuesta con otra?

Y millones y millones de preguntas como esas asaltan nuestras cabezas. ¿Acaso alguna vez encontraremos respuesta?

El problema de la mujer es que persigue un ideal, un hombre ideal. Perseguimos a un hombre que tenga todo lo que buscamos, todo lo que necesitamos. Y eso lectoras es totalmente imposible de encontrar. Aunque en cierto momento nos lo parezca, aunque queramos convencernos de ello. Claro que al principio todo es maravilloso, todas las relaciones al principio son maravillosas ¿Y después?

Esa es la pregunta que no nos hacemos, porque pensamos que hemos encontrado a ese hombre, que a partir de entonces todo será igual de fantástico.

Hasta que caemos de la nube. Algunas simplemente se adaptan, admiten su error y se acostumbran a una vida atada a alguien que quizás no les da nada, otras se revelan y por ello muchas veces son juzgadas.

Una Novia Para Mamá | Rivari ° G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora