-Los momentos que le queda a Natsu para salvarse han disminuido- Dice Polushka con una mirada triste hacia Happy desde su posición cerca de la ventana, mientras las gotas de lluvia las azotan resonando el sonido de estas por la casa, llenándola. El gatito avanza titubeante, sus ojos rojos por el llanto que no se detiene. Aferrándose a la larga capa de maga que lleva lanza un grito ahogado, se desmorona en sus pequeñas rodillas.
El cuerpo de Natsu muestra claros signos de lo pronunciado por la maga, la marca se ha expandido al ochenta y nueve por ciento, la fiebre no podía ser más alta, su cuerpo pierde más color e incluso su cabello se torna de un tono más claro. Las células de su cuerpo se están destruyendo debido al cambio en el estado homeostático de este.
-¿Qué haces ahí? Levántate- La voz de Akai reverbera en mis tímpanos, el sonido de su grito se hace pequeño, no puedo abrir mis ojos, mover mi cuerpo o siquiera hablar, todos los músculos de mi cuerpo se encuentran paralizados.
-Natsu, no podré resistir mucho tiempo... sin ti no puedo hacer mucho... ¡pelea conmigo, bastardo! ¡No te rindas! ¡Tú me prometiste que acabaríamos con esta oscuridad!... no me abandones... te lo suplico.
Las palabras de Akai me alcanzan finalmente, pero son calladas por la dulce voz de una mujer, reconozco su timbre, es ella...la chica que me besó.
-Mi nombre es Lucy, gusto en conocerte...
Natsu, te amo...
¿Qué haces ahí en la ventana? Ven baja...
Natsu. Natsu. Natsu.
Soy tan feliz a tu lado...creí que no sentías lo mismo por mi...por eso siempre callé estos sentimientos, pero me equivoqué... Natsu te amo.
¡No quemes mi ropa!
¡Basta, no me hagas cosquillas!
Te espero en mi casa, hoy es nuestro aniversario...te haré la cena...no llegues tarde.
¡Te salvaré de sus garras!
Te amo...adiós.
Mis parpados se abren sin el mayor esfuerzo, el sonido de esa voz, su voz me devolvió el poder que en un principio pensé haber perdido. Mi respiración es dificultosa, el sudor recorre mi frente, los anestesiados músculos recobran su elasticidad y fuerza, aunque no el equilibrio. Cayendo una, dos, tres veces al suelo, no me rindo. ¿Por qué esos recuerdos vinieron a mí? La pregunta azotó mi cabeza, no sé cuál es la respuesta para ello, sin embargo una vez que todo esto termine, la voy a buscar y averiguar mi vinculación hacia ella.
La fuerza que Natsu recobró dentro de su mente, se veía reflejada en su exterior, las manchas retrocedían, el color de su cuerpo y cabello comenzaba a retornar, la fiebre amainó. Su cuerpo recobraba el equilibrio, poco a poco.
Polushka, se acerca rápidamente al lugar donde yace el cuerpo inmóvil del muchacho, con asombro y esperanza en sus ojos llama a Happy, lo incita a que se acerque y contemple la mejoría del muchacho.
Lo puedo lograr, puedo salvar a Akai y este mundo, mi conciencia, esencia, ser, memorias. Solo un poco más de esfuerzo y podré vencer a esta oscuridad que insiste en acabar conmigo. No puedo morir, no es mi fin. Ella, debo encontrarme con ella. ¿Cuál era su nombre?... Lucy, sí, ese es su nombre. Natsu, convencido de que puede vencer y acabar con la oscuridad batalla consigo mismo, se levanta y comienza a dar golpear sin cesar, retomando nuevamente el equilibrio de su cuerpo, logra lanzar patadas, y junto a Akai hacen retroceder la espesa negrura. Lo lograremos...venceremos...venceré esta oscuridad.
Mas, la vida es cruel, cuando estas verdaderamente convencido de algo, es esta la que se encarga para negarte aquello que ansias.
¿Qué ocurre?, el mundo donde se encontraba Natsu, aquel lugar creado por el mimo se desmorona, pedazos del lugar caen a su alrededor, la negrura es completa. Natsu mira a su alrededor, pero no ve nada, no distingue nada. Corre dentro de la oscuridad, tratando de escapar. Una mano le sujeta deteniéndolo en seco, sin embargo no ve de quien es la mano mas sabe a quién pertenece Es la mano de Akai.
-Natsu, no te rindas...por lo que más quieres no te rindas- La tenue voz de Akai desaparece como en un susurro al decir: Eres un mago de Fairy Tail, eres novio de Lucy Heartfilia, tienes a Happy. ¡Lucha maldito bastardo!... ¡Vence toda esta mierda!
-¡Akai! ¿Dónde estás? ¡Akai!- pregunta Natsu desesperado, pero la voz de Akai desaparece dejando una estela de sonido esa despedida que no lo es, vuelve a estar solo e inmerso en la oscuridad siendo acunado en sus brazos por esta, brindándole en su doloroso abrazo: desesperación, tristeza, frustración, impotencia y amargura. Natsu trata de alejar dichos sentimientos, no obstante el agarre de aquel abrazo lo hunde hacia las profundidades de ese infierno. ¿De qué sirve luchar? Para nada, ¿por qué luchar? Por nada, ¿por quién luchar? Por nadie. Moriré, ese es mi destino, mi final esperado, la dulce muerte que me sacará de este maldito infierno. Lo siento Akai...
\c
ESTÁS LEYENDO
Caricias Nocturnas
FanficSus sentimientos, los que guardo por tanto tiempo para conservar la amistad que sostenía, se ve truncada cuando él da el primer paso. Aquellos latidos apasionados de ambos corazones son recíprocos, comenzando de esta manera una relación, pero no tod...