Jaziel

Capítulo 10.

Jaziel.

Estoy en la habitación acostada en mí cama hay una luz blanca alumbrando mi cama donde están Keanu y Ciro durmiendo a mi lado, que no deberían teniendo cada uno su cama, en frente de mí veo una luz roja, hay como una batalla de calor y frío en la habitación, los chicos duermen abrazados de mi, apartó con cuidado el brazo de los chicos para no despertarlos y me siento en mí lugar.

Observo como de la pared que tengo en frente con la luz roja, comienzan a salir unas alas negras, estás se abren dejando ver a un hombre joven de ojos violetas, piel pálida, cabello negro azabache bastante atractivo pero noto el parecido a Keanu y desvió mi mirada a Keanu y efectivamente se parecen, esto debe de ser un sueño así es como entran los Íncubos y Súcubos, él debe de ser el que rapto a Keanu.

—Así que tú eres, Jaziel. — Dice con una sonrisa dejando a la vista sus colmillos. — Los demonios que has enviado de vuelta me han hablado mucho sobre ti, pero olvidaron decirme lo hermosa que eres, mírate eres preciosa.

Me mira de arriba a abajo con lujuria y luego desvía la mirada hacia Keanu y sonríe y vuelve a mirarme.

—Por lo que me han dicho Keanu no te ha tocado y mucho menos al desperdicio que tienes a tu lado. — Dice refiriéndose a Ciro. — No se que has hecho pero estoy un poco enojado con él, le dije lo que debía hacer antes de que ese estúpido Arcángel se lo llevará y no ha hecho nada de lo que le pedí.

Dice con la mirada perdida hacia Keanu, quiero preguntarle de qué está hablando pero no puedo, debo ignorarlo de lo contrario quien se lo aguanta yendo y viniendo como le plazca, sin duda son los más molestos, pueden modificar los sueños como mas les plazca y absorber la energía poco a poco.

—¿Acaso no hablas Jaziel? Vamos preciosa quiero saber que tan dulce y melodiosa es tu voz. — dice con voz seductora. — Has cuidado muy bien de Keanu, todos haya en el cielo deben de estar orgullosos por lo bien que haces tu trabajo como protectora de esos inadaptados y ahora como niñera.

Por Dios, ¿A qué hora amanece? no parece rendirse.

—Vamos linda, no seas mal educada, nos divertiremos mucho.

El último que me dijo algo parecido fue Nil en el hospital y fue abrumador, agradecida estoy de que vuelva a ignorarme.

—No soy de los que se rinde puedo volver todas las noches que quiera, tal vez a un no he tocado tú punto débil, ¿Cuál será?— Dice dando pequeños toques con su dedo índice en su barbilla. —Ya se, ellos. —En ese momento sentí mi respiración acelerarse, estos chicos caerán en menos de dos minutos. —Keanu bueno él ya sabe como funciona esto, sería una pérdida de tiempo y no lo tengo, pero en cambio los hermanos, creo que necesitan una visita nocturna de mis hermanas, ¿No lo crees?— Dice con una amplia sonrisa y desaparece.

Despierto de golpe y muevo bruscamente a Ciro y a Keanu, se despiertan asustados y hago que se pongan de pie y que me sigan.

• Keanu—¿Qué sucede?

—Un estúpido Incubo me visitó. — Ambos abren los ojos. —Y como lo ignore enviará a sus hermanas a los tarados, así que cada uno vaya a una habitación y los despierte antes de que ellos abran la boca.

Sus habitaciones están cerca de la mía pero aún no se cual es cuál, nunca he entrado en sus habitaciones, Ciro entra en una y Keanu en otra y yo entró en la última.

Al no ver nada enciendo la luz al encontrar el interruptor pero quien sea que está durmiendo envuelto en sábanas no se inmuta, me acerco y le arrebató las sábanas pero nada sólo se acomoda de lado y puedo notar a Nil, no pienso desaprovechar esta oportunidad y le doy con la almohada.