Cap. 13 Tan cerca y tan lejos

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Año 2018
Jujuy, Argentina
Tan cerca y tan lejos

Elisabeth
Hace ya dos meses que no veo a Angel, que no hablo, ni tengo contacto con ella. Tampoco me busco o pregunto por mí. Lo se porque escuche su conversación con Emmanuel donde hablaron de toda la remodelación y la seguridad de la quinta de olivos, mencionaron mi apodo "halcón" pero en el momento que Emmanuel le quiso contar de mi y de como estaba, ella corto.
Me sentí mal en ese momento, un dolor en mi pecho se hizo presente, en verdad estaba interesada en ella, quería conocerla, saber más, pero no, simplemente se alejó y ahí entendí que no hay que forzar lo que no se dio. Que con el tiempo todo lo que siento por ella se terminara esfumando, que solo quedara como un recuerdo de lo que pudo ser y no paso.

— Elisabeth, ¿Estas despierta? – pregunto María al tocar mi puerta y entrar directamente, sin esperar mi respuesta.

— Para preguntar si estoy despierta y luego pasar directamente, mejor solo entra y ya – respondi mientras cerraba las puertas del balcón, me gustaba abrir las puertas y apreciar el paisaje, pero casi siempre pasa lo mismo, había camarógrafos justo debajo del balcón, esperando sacarme una foto. Desde lo que paso no me mostré públicamente, era lo mejor, al menos por el momento.

— Se que estaba pautado quedarnos tres meses por el norte del país, pero ya no puedo verte así – dijo María sentándose en la cama

— ¿Así como?

— Aunque lo quieras ocultar se que estas triste y decepcionada de lo que ocurrió con Angel, a mi no me puedes engañar – respondió en lo que yo solo pude soltar un suspiro y sentarme a su lado

— Es que en verdad me gustaba, – decirlo en voz alta era confirmar aún más mis sentimientos – siento que vuelvo a ser esta estúpida adolescente que quiere vivir su romance de novela, pero eso no sucede, estamos en una realidad que es dura, que no es fácil reconocer el amor y menos que menos el amor de una mujer hacia otra – María me envolvió en un abrazo, las lagrimas rogaban salir una vez más – jamás pensé que me atraería, siempre creí verme casada con un hombre

— Desde el primer día supe que algo había entre ustedes dos, era muy evidente al menos en ti, aún recuerdo cómo te brillaron los ojos al verla...

— No sigas – dije interrumpiendo, tape mi cara con mis manos, me da vergüenza que hasta ella notara mis actitudes con Angel – todo eso quedo atrás, tengo que olvidarla

— Buena suerte en intentarlo – me dio una palmada en la espalda, luego se levanto de la cama para ir a mi armario y sacar una de mis valijas – ahora tenes que ordenar tu ropa, salimos en tres horas, hay que ir a la casa rosada, habrá reunión con los ministros, hay movimientos que no me gustan, mas aun si nos creen que somos tontas, por el momento lo que hice fue retener el dinero, ninguna obra publica o pedido de algún ministro fue aprobada como pediste

— Bien – solté un suspiro – aun no puedo creer como siguen subestimándonos, son muy obvios algunos.

Luego de nuestra charla con María, ambas ordenamos nuestras ropas para salir lo más rápido posible. Porque lo que hacemos desde que andamos de provincia en provincia es que tomen nuestro lugar unos dobles. Lo cual termina despistando a los paparazzi. Así era mas seguro. Además de que la única que sabia en tiempo real nuestra ubicación era Angel.

Una vez dentro del avión privado que teníamos, me puse a revisar los papeles que demostraba claro movimiento de dinero que jamás aprobé, porque estas cosas debían pasar por mí, nadie puede aprobar ninguna obra publica sin mi permiso. Es momento de ponerles un freno antes de que sea tarde.
Creí que una vez que los visitara a todos esto acabaría, pero no, seria muy ingenuo de mi parte creer que todo se solucionaría, este país estaba hundido, roto, perdido, pero podía ver una pequeña luz, me prepare para esto, solo Dios era testigo de mis noches de desvelo mientras estudiaba todos los escenarios, cada movimiento, que decir y que hacer. Lo tenia todo perfectamente calculado.
Muchos economistas me dijeron loca, que no podría jamás hacer todo lo que tenia planeado, que era una locura con este país. Que sacarlo a flote influía mínimo 50 años.
Es imposible, eso lo sabía, el "no" lo tenia ganado desde que presente todo mi proyecto y se armo revuelo. En estos momentos se esta pidiendo a todos los diputados empezar a aprobar todo lo que tenía pensado, María tendría que estar ahí, es demasiado tedioso, pueden pasar 24 horas ahí, discutiendo.
Hay que estar preparados, pedirle al ministro de seguridad que ordene a los policías estar por la calle, es muy probable que nos quieran disuadir con algún piquete, algún movimiento lo hará, eso lo sabía.

La presidente; Un país perdido...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora