Me encontraba en un gran dilema, ahora estoy embarazada de alguien que ni siquiera recuerda un poco sobre mí. Soy una total desconocida para él.
Ahora ya estaba en casa de Jimin y Soo ¿Cómo me regreso a casa? Es imposible. Ellos me dieron las llaves de una habitación, ahí podré dormir un poco. Le pedí a Taehyung que no diga nada sobre mi embarazo, basta con que Yoon-Gi no recuerde nada como para decir que estoy embarazada de él.
Esa noche no pude conciliar el sueño, solo pude pensar y pensar las palabras que me dijo Yoon-Gi.Al día siguiente, por la mañana me duché y Soo me prestó algo de ropa. La ropa que usa Soo es muy colores pasteles, en realidad no me agrada mucho, pero es lo único que hay para ponerme. Ella estaba encantada con la manera en la que me quedaba su ropa.
Soo vino por mí a mi habitación, me avisó que ya estaban sirviendo la comida y que si podía bajar. Así que bajamos juntas. Me senté a lado de Soo.
- ¿Qué tal se ve Hana? -Dijo Soo-
- Se mira hermosa con ese vestido. -Dije y sonreí- ¿La puedo cargar?
- Claro. -Me dió a Hana y también me pasó su comida, pues le pedí que si yo podía darle su comida-
Ahora Taehyung también come con nosotros, pues después de lo que pasó y tanto tiempo en reposo, ellos le tomaron mucho cariño y ahora es parte importante en el equipo de mafiosos.
Taehyung se sentó a mi lado, luego de unos minutos bajó Yoon-Gi y se sentó frente a mí, me miraba al parecer con odio y rencor, como si yo le hubiese hecho algo.- ¿Qué haces aquí? -Dijo Yoon-Gi refiriéndose a mí-
- ¿Qué hago aquí? -Pregunté-
- Sí, no tienes el suficiente estilo para ser amiga de Soo. -Dijo- ¿Qué eres? ¿Una infiltrada?
- Es mi amiga, no creas que todas mis amigas se visten de colores pasteles. -Dijo Soo-
- Ella es ruda, tus amigas y esposas del equipo son frágiles como un papel. -Dijo Yoon-Gi- ¿Eres una infiltrada? ¿Acaso vienes por nosotros?
- Basta Yoon-Gi. -Dijo Jimin- No ofendas a las amistades de mi esposa. Ella no es ninguna infiltrada.
- Te estaré investigando. -Dijo Yoon-Gi-
- ¿Podemos seguir comiendo? -Dijo Soo-
Todos seguimos comiendo, sin ninguna palabra, al parecer él no confiaba en ninguno de los que estábamos en esa mesa.
Sé cómo se sienten todos, yo solo tengo poco tiempo de estar conviviendo con él y me pesa tanto que no me recuerde, aunque duele aún más que él no recuerde al que es como su hermano, su cuñada y su guardaespaldas de confianza.Terminamos de comer, él dijo que iría a su habitación a hacer unas llamadas importantes, Jimin le dijo que no se fuera, que tenían cosas importantes que arreglar y que sus colegas estarían en su casa en unos minutos. Él un poco disgustado, aceptó y se quedó con nosotros. Yo no podía dejar de verlo pero debía hacerlo, si de por si cree que soy una infiltrada, si lo sigo viendo pensará lo peor de mi.
Unos minutos después, escuchamos los autos llegar. Eran sus colegas acompañados de sus esposas, al entrar todas me vieron y se asombraron. Todos sabían la historia de Yoon-Gi y mía, pero también estaban conscientes de que él no me recordaba, así que se obligaron a no hacer ningún comentario hasta estar solas.
Ellos se fueron a la oficina de Jimin, a nosotras nos dejaron en la cocina. Ahí comenzaron a platicar conmigo.
- ¡Dios! Creí que jamás te volveríamos a ver. -Dijo Hye, esposa de JHope-