Capítulo 6 - Borrar el pasado.

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Después de presenciar la discusión entre las chicas, Jenna se colocó los audífonos y siguió caminando hacia casa.

Al llegar, Aliyah se acercó y la abrazó con alegría.

— ¡Hola! — exclamó.

Jenna correspondió al abrazo con una sonrisa forzada. Luego, se dirigió a la cocina, donde encontró a su madre.

— Ya llegué, mamá — comentó con un tono visiblemente desanimado.

Natalie percibió el cambio en su hija.

— ¿Estás bien, Jenna? — preguntó con preocupación, acercándose a ella.

— Sí, solo que hoy ha sido un día extraño, y siento que todo fue mi culpa — respondió Jenna, forzando una risa y negando con la cabeza.

— ¿Te gustaría hablar de ello? — preguntó Natalie, colocando las manos en los hombros de su hija.

— Estoy bien, mamá, en serio — insistió Jenna con una sonrisa. — ¿Hay algo para comer?

— Tu padre y yo saldremos esta noche. Vamos a cenar con los padres de Charlie — informó Natalie.

— ¿Nosotras no iremos? — intervino Aliyah, captando la atención de Jenna.

— No, no iremos a su casa. Nos encontraremos en un restaurante y les dejaremos algo para cenar — explicó Natalie.

Jenna sintió un alivio al pensar en evitar el enfrentamiento con los Pattinson.

El momento fue interrumpido por el sonido del teléfono.

— Hablando de los Pattinson — comentó Natalie mientras contestaba —. ¿Bueno?

Jenna y Aliyah se trasladaron a la sala mientras su madre continuaba la conversación. Tras cinco largos minutos, Natalie regresó junto a sus hijas.

— ¿Quieren ir a la casa de los Pattinson?

— ¡Sí! — respondió Aliyah, emocionada.

— ¡No! — exclamó Jenna al mismo tiempo.

— Ah... — Natalie frunció el ceño, confundida —. Ya me perdí...

— Estaremos bien en casa, ustedes vayan a divertirse — dijo Jenna, esbozando una sonrisa nerviosa.

— Pero... — Aliyah miró a su hermana, quien rápidamente le dio un pequeño golpe en el hombro.

— ¿No quieres ir por Charlie, verdad? — preguntó la señora Ortega, con cierta curiosidad.

Jenna asintió ligeramente con la cabeza.

— ¿Te hace daño? — preguntó Natalie, preocupada.

Jenna suspiró, bajando la mirada.

— Aún es raro, mamá. Por más que intente enfocarme en el presente, el pasado sigue pesando sobre mí. No es fácil olvidar lo que ocurrió.

— Sabes, yo pienso que ella no es una mala chica, solo le hace falta el amor de su padre — comentó Natalie con suavidad.

Jenna asintió, procesando las palabras de su madre, antes de darse la vuelta y subir las escaleras hacia su habitación. Al llegar, se tumbó en la cama, buscando algo de confort en la familiaridad de su espacio.

Pocos minutos después, Aliyah entró sin previo aviso.

— ¿Qué haces? — preguntó, curiosa.

Polos Opuestos || Jenna Ortega x Fem.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora