Bill, Tom y Georg son los alfas más deseados de todo Berlín. Hijos de buenas familias, guapos y jóvenes, se la pasan viviendo la vida a mil, entre fiestas, alcohol, drogas y omegas. Todo iba de maravilla hasta que una noche en una de sus tipicas fie...
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Pov Bill
Tom me había traído a casa, le ofrecí entrar para que pudiera secar su ropa en la secadora de mi lavandería pero el muy tonto me dijo que no.
"Sí estoy contigo en tu casa no podré contenerme y quiero hacerlo cuando estés 100 % seguro para que no me detengas"
Maldito! Lo invite exactamente porque quería continuar, no porque fuera una buena persona que se compadeció de él.
¡Dios mío! ¿Pero qué cosas estaba pensando? Y de mi mejor amigo, no puede ser que realmente me lo quiera coger ¿o si ? No!! No había forma, solo estaba caliente, nada más.
De hecho, deberia tomar los supresores que me recetó la doctora, no quería por nada del mundo volver a experimentar un celo y terminar en la cama con mis dos amigos de nuevo.
Un mensaje me sacó de mis pensamientos.
Mike discoteca
¡Hey Bill! Hace tiempo que no nos vemos, tienes tiempo hoy? Ya sabes, para divertirnos un rato 😊
Mike era un precioso Omega de cabello negro y ojos azul intenso al que había follado un par de veces en uno de los apartados del KitKat. Pero ahora yo también era un omega no tenía sentido que venga o tal vez sí, qué más me daba, estaba caliente y él sería el indicado para liberar todo este libido que tenía desde que salí con esos dos y no hicieron más que calentarme.
Mike discoteca
Claro que sí bebé 😘, te paso mi ubi para que vengas a mi departamento a pasar un buen rato. ✓✓
📍 ✓✓
Fui a ducharme, emocionado por lo que me esperaba, un nuevo mensaje me llegó pero solo era Georg, no me molesté ni siquiera en abrirlo, tenía cosas más importantes en las qué enfocarme.
Luego del baño, me arreglé y arreglé un poco el departamento, creando un ambiente ameno para la ocasión. Luego de una hora, el timbre de mi departamento sonó, fui a abrir y ahí estaba mi chiquito precioso.
--Mira nada más que hermosura-- le dije tomándolo de la mano para jalarlo dentro y besarlo en la mejilla mientras lo abrazaba.
--Jiji, hola Bill ---me abrazó de vuelta.
Lo llevé al living para que se sentará en el sillón frente al gran plasma donde reproduje un vídeo musical.
--¿Cómo has estado? -- me preguntó mientras besaba su cuello blanquecino.
--Mmm? Yo? Todo bien --dije metiendo mi mano por debajo de su camiseta para acariciar su abdomen plano.
