Capitulo 26

47 40 0
                                    

Supongo que a veces tenemos buenas intenciones pero no siempre estás son buenas decisiones.

01 de enero del 2023

Desperté y fui a ver a Abdi.

-Buenos días -le dije a Abdi emocionada- ¿Pudiste dormir bien?

-No pude dormir casi nada Ackeli -me dijo- es un poco incomodo no dormir en tu casa.

-Bueno pero lograste sobrevivir está noche -le dije riendo sarcásticamente-.

-Si, pero me alegra estar aquí -me dijo emocionado- porque así puedo despertar y poder verte.

Me sonroje, siempre lo hacía cuando estaba con Abdi, él era muy lindo.

Me dirigí a la cocina y le ayude a mi madre a preparar el desayuno, Abdi estaba con mi hermano jugando en la sala.

-Abdi. ¿Puedo preguntar algo -preguntó mi hermano Daniel-.

-Si está bien -le respondió Abdi-.

-¿Por qué estás con mi hermana? -pregunto Daniel seriamente-.

-¿Por qué no estarlo? -preguntó Abdi-.

-Bueno Abdi, sin ofender pero...

-Vamos dilo -dijo Abdi con expresión seria-.

-Ackeli siempre esta molesta por todo, no siente afecto por nadie y no entiendo como puedes querer a una persona así -dijo mi hermano con cierto gesto de curiosidad-.

Por desgracia había escuchado lo que mi hermano había dicho de mi, no lo culpo, yo en casa era una piedra ante mi familia.

-Algún día vas a crecer y entenderás muchas cosas -le dijo Abdi a Daniel-.

-Claro que no, yo nunca tendré novia -dijo Daniel- o si tengo será hasta que sea mayor de dieciocho años.

-Ya veremos -dijo Abdi-.

-Lo cumpliré, verás que si, apostemos doscientos pesos -dijo mi hermano insistente-.

-Esta bien -dijo Abdi cortante-.

Me dirigí hacía Abdi y lo abracé, fingiendo no haber escuchado su conversación.

Estábamos preparando la mesa para comer, Abdi se sentó, le dije que esperara un momento y me fui a mi habitación.

-Ackeli -dijo mi padre mientras entraba a mi habitación-.

-¿Qué paso? -respondí seriamente-.

Mi padre se veía demacrado, beber alcohol lo desgastaba bastante y seguía tomando.

-¿Por qué eres así Ackeli? -me pregunto con tristeza- ¿Por qué tú y Emilia me odian tanto?

No sabía que decir, lo que decía no era cierto, él estaba muy ebrio y se estaba desahogando.

-No entiendo -dijo mi padre- toda la vida he trabajado por ustedes y ustedes son unas malagradecidas.

Mi padre comenzaba a enojarse.

-No, no es así -musite, hablar con mi padre en esa situación me ocasionaba un nudo en la garganta que no podía evitar-.

-¿Por qué no pueden perdonarme? -dijo molesto mientras presionaba su puño-.

-¿Qué está pasando aquí? -pregunto mi madre al entrar a mi habitación-.

-No es nada madre -respondí con una sonrisa fingida-.

-Ackeli no pueden estar peleando ahora -dijo mi madre molesta- tu novio está en el comedor y hasta allá se escucha su escandalo.

-Vamos a comer -dije rápidamente-.

Ackeli y las marcas en su memoria Donde viven las historias. Descúbrelo ahora