Esa noche sueño con Sean. Estamos en la playa,bañándonos. Él se acerca a mí y me coge,yo enlazo mis piernas alrededor de su cintura. Me sonríe y me besa. Más tarde me tumbo en la playa y me lo hace como nunca nadie me lo ha hecho.
Me despierto sudando. ¡Joder,Sean te odio! No puedo más, jamás voy a olvidarlo si sigo así. Cojo la almohada y la estrello en la pared. Me levanto y me ducho.
Bajo a la cocina. Cojo un tazón y los cereales, menos mal que Zen se acordó de que comprara comida,sino me veo sin nada para desayunar.
Después de desayunar me visto. Me pongo una camiseta azul corta,unos pantalones cortos muy cómodos y mis vans rosas. Me recojo el pelo en un moño,hoy no me apetece coleta.
Salgo de casa y me voy a dar una vuelta. No tengo nada que hacer así que me voy a ver a Julio. Llego a su casa cuando sale de ella un chico sin camiseta abrochandose los vaqueros.
-¡Lisa,pasa,pasa! -me hace un gesto con la mano.
-¿Qué tal Julio? -pregunto y cierro la puerta.
-Genial. Follando sin parar,jamás te vuelves a echar pareja -sonríe. Aprovecha tus armas -señala mis pechos.
-Veo que eres tú -digo riendo.
-Claro que soy yo,aunque he cambiado un poco -se quita la camiseta y deja ver su abdominales. Me he apuntado al gym,no sabes la cantidad de chicos que he conocido -sonríe y se muerde el labio inferior.
Julio ahora aparte de estar petado,tiene el pelo más corto,está pensando en hacerse el septun,no pienso dejarle. Ha comenzado a fumar y a beber a menudo,él es un tío genial pero lo han destrozado.
-¿Sigues bebiendo? -pregunto con miedo.
-No,después de la tercera noche en el hospital lo dejé -abre el frigorífico y coge una cerveza. ¿Quieres? -me pregunta.
-No,gracias -le contesto. Julio...¿vas a ir a clases después del verano? -miro al suelo.
-Posiblemente,pero no creo que vaya hacer algo.
-¡Joder! No puedo más. No pienso dejar que tires tu vida a la mierda.
-¡Mi vida ya es una mierda! -grita y tira la lata contra la pared.
-¡Julio! -grito asustada.
-Lo siento, lo siento Lis -se pasa las manos por la cara. Vete,por favor -dice llorando.
-Jul...
-¡Qué te largues! -tira la silla al suelo.
Retrocedo,jamás había visto a Julio así. ¡Joder! El Julio que yo conocía ha desaparecido...ha sido convertido en un puto monstruo.
-Me iré pero no te cargues tú vida,tenemos diecinueve años...
-Vete -dice evitando mi mirada.
Llego a mi casa y me encierro en el baño. Me meto en la ducha con la ropa. Y comienzo a gritar y llorar. No puedo más, Sean,Julio y Zen. No paro de gritar,me siento y dejo que el agua me empape. Las lágrimas se deslizan por mis mejillas pero se ocultan entre las gotas que se deslizan por mi cara.
Me tumbo en la cama y me duermo. Cuando despierto son las 09.00pm,bajo a la concina,no tengo hambre. Saco la basura y me quedo mirando el cielo.
-Hola,Lis.
-¿Sean? ¿Qué quieres?
-No seas así de borde,sé que te alegras de verme.
- Mentira.
-Verdad -da un paso hacia a mi.
-Mentira -retrocedo y choco con la pared.
-Noto como se te agita la respiración -apoya su mano en la pared y se acerca a mis labios.
No puedo evitar ponerme nerviosa,todavía lo quiero. Lo sé y él por desgracia lo sabe. No puedo permitir que siga creyendo que voy detrás de él. Respiro y le doy una ostia.
Sean retrocede.No se esperaba que reaccionase así. No dice nada,se da la vuelta y se larga. No dejo de mirarlo hasta que lo veo desaparecer.
Una vez que ya no lo veo,me siento en el suelo y comienzo a llorar. No sé si por la ostia que le he dado, porque sabe que le quiero o por ambas. Lo único que si sé es que olvidarle me va a costar un mundo
