Zen y yo hemos establecido una relación...no tengo ni idea de que se trata exactamente pero como le he dicho me voy a dejar llevar. Estoy harta de llorar y pasarlo mal por Sean,se acabó voy a empezar a olvidarlo. No merece mis lágrimas.
Llego a casa,Pablo se está duchando. Miro mi móvil, no le he mirado en todo el rato desde que me encontré a Zen. Tengo una llamada de Julio y unos mensajes de Christian. No estoy como para verles así que borro los mensajes y las llamadas.
Me siento en el sofá, pienso en el piso donde vivíamos antes. Podría irme ya y dejar de molestar a Pablo. No tardo nada en decidirlo,me levanto y espero que salga Pablo.
Cuando sale le explico más o menos porque me voy a ir al piso. Le digo que es para que este más cómodo y que tengo que limpiarlo para darle una sorpresa a mi hermana. Las dos excusas son verdad aunque no lo parezca.
Llego a la casa. Todo esta como hace dos años,increíble. Entro y lo primero que hago es subir y colocar mis cosas en mi habitación, los cargadores, libros, preservativos,ropa. Joder lo típico que tiene una adolescente en su cuarto.
Alguien llama a la puerta,bajo y me quedo asombrada,no puede ser,es Zen. ¿Qué hace aquí?
-¿Qué haces aquí? -le pregunto sorprendida.
-Nada,tu príncipe viene hacerte una visita sorpresa -dice con esa sonrisa tan perfecta.
- Podías haber avisado -sacudo la cabeza.
-Entonces no sería sorpresa -me imita.
-Bueno pues me vienes genial,tengo que limpiar toda la casa -le sonrío.
-Mejor vengo más tarde -me guiña un ojo y entra dentro riendo.Tardamos un montón en limpiar la casa. Pero Zen es idiota,no paraba de echarme agua cuando estábamos en el baño,de darme con el plumero cuando limpiabamos el polvo o simplemente no paraba de picarme o hacerme reir o cogerme y besarme por que si,porque le daba la gana. Aunque en el fondo me gustaba.
-Joder lo que hemos tardado -se deja caer en el sofá.
-Pff,estoy agotada -me tiro en el otro sofá pero me agarra y me tumba encima de él.
-¿Estás cómoda ahí? -señala su entrepierna donde me encuentro apoyada.
-Sí,se siente muy agusto aquí -comienzo a reír.
-¿Qué? ¿Por qué te ríes? -pregunta con cara de tonto.
-De nada tonto -beso su mejilla.
-¿En serio? -me mira sorprendido. ¿En la mejilla? -pone los ojos en blanco.
-Eres tonto -le beso.
-Eso esta mejor -me despeina.
-¡Ay! -me quejo y me peino como puedo.Hace dos horas que se fue Zen. Son las 10.00pm y no he cenado. No pienso cenar,estoy muerta. Subo a mi cuarto y me tiro en la cama. Mi iPhone suena,lo busco a ciegas por la cama,lo encuentro y leo el mensaje de Zen.
- No sé que clase de relación tenemos. Pero me gusta que te dejes llevar,te espero en tu tejado,no traigas nada ya lo traigo yo todo.
Leo el mensaje,lo vuelvo a leer unas cinco veces. ¿Va en serio? ¿Está en el tejado? Abro la ventana y me encuentro a Zen tumbado en una manta,con una pizza y dos latas de coca-cola. Me quedo boquiabierta,esto no puede ser real.
-Tienes que estar de coña-digo riendo.
-Nop,no lo estoy -esboza su sonrisa sexy y me guiña un ojo.Me acerco y me siento a su lado,estamos comiendo y observando el cielo nocturno. Debo de estar soñando. Terminamos de comer,Zen coge las cosas y las tira dentro de mi habitación. Tira de mi y me tumba a su lado. Me apoyo en su pecho.
Me acaricia mi pelo mientras yo le acaricio su pecho. No dice nada,solo me sonríe. Joder esa manera de sonreír tan pero tan sexy,esa manera de guiñar el ojo o la mejor de todas esa risa...dios me encantan. Me encanta. Sigue sin decir nada,yo tampoco le digo nada aunque ambos sabemos que lo estamos diciendo todo.