🥀- BAJO LA LUNA.

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❁⋆Capítulo XVIII⋆❁
❁⋆Bajo la luna⋆❁

❁⋆Capítulo XVIII⋆❁❁⋆Bajo la luna⋆❁

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Kaylee Felling

—Kaylee.

Su voz sale de sus labios como una melodía suave y melosa. Su cabello castaño oscuro tiene unos mechones del mismo color pero más claro, lo tiene largo y revuelto, sus ojos marrones tienen un brillo especial en cual me puedo ver reflejada bajo la luz de la luna.

Lucas viste con ropa holgada y obscura, y si no me equivoco está más alto que la última vez.

Una sonrisa genuina llena de felicidad abarca mis labios, y sin mucho que pensar me lanzo a sus brazos recibiendo su olor y su calor corporal.

—Te he extrañado mucho fresita—susurra contra mi cuello haciéndome sentir un cosquilleo en mi abdomen y alborotando mi corazón.

—Yo también te he extrañado.

A pesar de tener los ojos cerrados puedo sentir como estos cosquillean por las lágrimas.

Él está aquí, mi pequeño amigo de la infancia, el chico con el que me escapaba todas las noches para hablar por las madrugadas en el árbol más frondoso del parque y sobre todo, el chico que me ha apoyado en cada momento y situación.

Su mirada brillosa se posa en mi al separarnos.

—Estás hermosa, fresita— una sonrisa cálida se asoma en sus labios.

—Gracias— susurro; y enseguida puedo sentir como mis mejillas se tornan rojizas.

Maldito rojo, maldita vergüenza, maldita pena. Aparto la mirada de él para evitar algún comentario burlesco de su parte.

—No apartes la mirada, por favor— sus cálidos dedos tocan mi barbilla para conducir mi rostro y mirada hacía él— me gusta ver tus mejillas ruborizadas.

Si antes mi rostro estaba rojizo, ahora tengo toda la sangre de mi cuerpo centrada en mi cara nada más.

Una risa ronca sale de su boca y termina en mi cuerpo erizando por completo cada fibra de mi.

No recuerdo su risa así de varonil y roca.

—Tonto— le golpeo el hombro en un acto de nerviosismo.

Lucas parece más maduro, y la forma de hablar, de expresarse y reír me lo confirma.

Una de sus manos, que se encontraba en su pantalón se dirige a mi cabello para colocar un mechón de este tras mi oreja. El simple roce de su piel contra la mía, manda un escalofrío a todo mi cuerpo, poniendo de punta cada uno de mis vellos.

WOUNDS ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora