— ¡Príncipe Taehyunggg! Debe cambiarse y comer algo, salen en una hora.
Taehyung abrió los ojos despertando de un profundo sueño. La voz de Miyeon le trajo a la realidad.
El viaje.
Un largo viaje se aproximaba y debía alistarse. — ¡Diosa! Voy a cambiarme y de ahí comeré.
— Le traeré la comida príncipe para que se apresure. El rey dijo que estaba bien.
— ¡Bien! — Tae gritó desde el baño. Se duchó rápidamente y cuando salió se encontró con una pequeña pero poderosa armadura encima de su mesita de noche. Rápidamente los recuerdo golpearon su mente.
El pelinegro se sonrojó intensamente.
Jungkook lo había tocado.
Pero...
— ¡¿Qué rayos pasó?!— sopensó.
El Omega intentó recrear lo último que recordaba. — Ok, yo estaba aquí y él me tocó la mejilla... ajá. Luego me cogió la otra mejilla y de ahí... De ahí... ¿Por qué no recuerdo? ¿Acaso él y yo?. — se tapó la boca impresionado.
Mis manos queman por tocarte.
Tae corrió y se tiró a la cama comenzando a patalear como pequeño enloquecido y enamorado. — No puede ser... ¿Lo soñé? ¿Me desmayé? Ay nooo!!! Por qué no recuerdo...
Jimim entró de golpe a la habitación. — ¿Qué no recuerdas?
El pelinegro se asustó reponiéndose poco a poco. — Ah...ah bueno, no recuerdo a qué hora me dormí, me estaba cambiando Mimi...
— Lo sé Miyeon me dijo, vine a estar contigo antes que te vayas, te voy a extrañar mucho. — puchereo y fue corriendo a abrazar a su amigo.
— También yo Mimi, esto será difícil, pero te prometo que valdrá la pena...
— Lo sé, además sé que estarán bien, llevas a un par de alfas locos y fuertes, eso ayuda.
Tae sonrió asintiendo.
— ¿Es eso una armadura? ¿Te la dió Jungkook?
— ¿Cómo sabes?
— Él las hace, nunca había visto una así de delicada, no parece tan incómoda de usar debajo de la ropa, además te cubrirá muy bien. Te cuida mucho.
El doncel se rascó la cabeza nervioso. — Seguramente a su esposa le entregó una igual.
El rubio puso los ojos en blanco. — Ash Tae, no sé a quien intentas engañar, pero a mí no y si le dió una aún así fue por compromiso, más no con las mismas intenciones que contigo.
Miyeon entró a la habitación interrumpiendo la conversación. Tae internamente le agradeció aquello.
— Coma príncipe, le dejo dos túnicas livianas para que lleve, algunas hierbas, su cepillo de dientes, un peine y también un libro.
— Gracias Miyeon, eso es suficiente.
La beta arrugó el rostro. — No lo sé Tae, debería de llevar sus cremas, maquillaje, joyas y esas cosas...
— Ay Miyeon, se va a una misión peligrosa, no de vacaciones.
— Pues sí pero va el príncipe Jungkook y debe de verse muy bien...
— ¡Miyeon qué rayos insinúas, es un alfa casado y yo comprometido.
— Comprometidas mis nalgas.
— Casado mi trasero.
Taehyung boqueó sorprendido por los comentarios de sus amigos. — Ustedes son insoportables, la diosa luna se alejará de ustedes.
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El Omega del rey.
Fantasy- Príncipe no debería hablarle así al omega del rey. - Mis disculpas su alteza, a veces olvido ese detalle. Sucede que no lo veo como el omega de alguien. - Pues lo soy. - No lo eres. No a menos que tú lo decidas. - No tengo voz aquí. - Haré que la...