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Ambos se encontraban ya en la enfermería, en camillas diferentes pero estando a un lado del otro, sus ojos no evitaban chocar de vez en cuando enviando una serie de sentimientos malos a su ser.

—¡Auch! - exclama el castaño.

—Te dije que no te movieras. - regaña Hyunjin.

Jisung sólo rueda sus ojos y permite que su amigo siga curando su labio partido y aplicando pomada en el moretón de su mejilla.

Por otro lado Felix y Changbin se encargaban de curar a Minho quien no emitía ningún sonido o queja.

—Pensé que habías dejado esto de las peleas. - dice Changbin.

—Él empezó.

—Y tu decidiste seguir al parecer.

Mientras su amigo seguía regañandolo Felix iba por unas curitas que estaban en la mesita en medio de ambas camillas, hasta que su mano chocó con otra quedando en un agarre no tan fuerte. Al levantar su vista y ver que se trataba de Hyunjin sólo pudo sonrojarse demasiado.

—Oh, lo siento. - quitó su mano rápidamente.

—Está bien, agarra las que necesites.

El rubio quedó embobado ante la sonrisa amable que Hyunjin le dedicó y antes de que pudiera reaccionar alguien más lo hizo por el.

—Oye pecas, deja de coquetear.

—Oh sí, lo siento Minho.

Después se decide por agarrar 2 curitas, una para su mejilla que tenía un poco de sangre y otra para su frente que había sufrido un golpe al estrellarse contra el lavamanos.

Luego Hyunjin agarró las que necesitaba y mientras se encargaba de colocarlas con cuidado en el rostro de su amigo, entró el maestro que los había separado en la pelea.

—Chicos, el director los está esperando en su oficina, cuando terminen tendrán que ir.

—¿Y mis clases? - pregunta Jisung. —No puedo perder ninguna.

—Eso debiste de haber pensado antes de golpearme.

—No te hablaba a ti, idiota.

—Minho tiene razón, Jisung, si no querías meterte en problemas no debiste de haber empezado esa pelea. - termina por decir el maestro sin dejarle explicar nada a Han. —Dale tus explicaciones al director.

Y sin más que decir cierra la puerta para dirigirse a su próxima clase dejando q los alumnos en aquel cuarto.

—Bien, ya terminé de curarte, ahora puedes ir a que te regañen. - dice Felix.

—No me van a hacer nada.

—Yo también terminé, pueden irse ahora antes de que el director se enoje.

Jisung le da las gracias a su amigo y se levanta de la camilla sintiendo un ligero dolor en su espalda ya que se había golpeado contra el suelo. Seguido de Minho quien aún seguía con el dolor en su cabeza; los dos salieron de la enfermería siendo uno atrás de otro ya que no querían verse las caras. Minho observa como Jisung caminaba lento y sobaba su espalda de vez en cuando, al parecer lo había azotado muy fuerte contra el suelo.

Su mirada bajaba poco a poco dando con su espalda baja y finalmente a su trasero el cual se movía rítmicamente, no pudo evitar fijar su vista en sus caderas, eran anchas pero sin ser exageradas, al contrario de su trasero el cual fácilmente podía ser apretado por sus manos por mucho tiempo. Jisung llevaba una camisa blanca y el sol de la tarde se reflejaba en esta, dando una transparencia ligera y permitirle ver su fina cintura que se escondía debajo de la ropa, se veía delgada y hermosa y parecía hecha totalmente para que sus manos se encajaran en ella. Dios, en serio Jisung tenía un cuerpo de ensueño, uno que muchas chicas querrían tener.

Ambition; minsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora