𝐎𝐍𝐋𝐘 𝐅𝐀𝐍𝐒ᵏᵒᵒᵏᵐⁱⁿ

Capitulo 09

Un fuerte rayo de luz chocó en su rostro haciéndolo removerse incómodo y volver a hundirse en las sábanas.

Espera. ¿Qué pasó anoche?

Enseguida salió de su escondite asustado y empezó a ver todos los lados de esa habitación. No sabía dónde estaba y menos con quien. Tan solo recordaba borroso la noche anterior.

Jungkook, con quien pasó la mayoría del tiempo. Si esa no era su casa debería estar completamente loco.

Revisó su cuerpo únicamente cubierto por una ancha camisa negra y buscó con la mirada su ropa, no había ningún rastro de ella.

Así salió de la cama confundido, para su suerte había un celular en la habitación a un lado del suyo. Logró prenderlo y sin más fue a revisar la galería de fotos.

Jungkook, negocios y más Jungkook.

Se sintió aliviado de eso por un segundo, sabía con quien estaba. Pero el tatuado no estaba a su lado.

Sobre un sofá había un suéter holgado que usó para cubrir más su cuerpo y salir a buscarlo por el lugar.

— Mierda...— Jimin susurró tras salir. A su lado derecho había unas escaleras con un lindo color crema en el mármol. Frente podía ver la gran sala de estar y una pantalla de cincuenta pulgadas quizás. ¿Enserio esa era su casa?

A lo lejos escuchó una conversación y tembló del susto pero fue hacia ella.

Jungkook estaba en la cocina con medio cuerpo descubierto y simplemente unos pantalones (los mismos que llevaba en la fiesta) cubriéndole, tenía un teléfono de casa en su mano.

— No te preocupes, ahí estaré. No tengo nada que hacer mañana, ya te lo dije — rió hablando, levantó la mirada chocando con los ojos del rubio, lo analizo rápido de pies a cabeza — Sí, esta bien. Tengo que colgar, adiós idiota.

El tatuado terminó la llamada y regresó el teléfono a la pared, caminó despacio hasta el más joven.

— Despertase — sonrió brillante y corrió un par de dedos por su mejilla.

— ¿Qué hago aquí?

— Buenos días para ti también. Toma esto. — Jeikei le entregó una taza de té, Minnie la tomó despacio — Te traje a mi casa cuando te pusiste muy ebrio.

— ¿Dónde está mi ropa?

— Lavándose, bebé. La ensuciaste al vomitarte en mi auto — el tatuado también tomó a su taza y se mantuvo viéndolo.

— ¿Lo vomite? — el rubio se tiró el cabello frustrado y negó con su cabeza — Lo siento, lo limpiaré.

— No te preocupes, lo lleve a limpiar, hace tiempo no lo hago. — Jungkook rió y se sentó en la mesa — ¿Cómo te sientes?

— Me duele un poco la cabeza. — Jimin fue a sentarse a su lado y bebió — Gracias por hacerte cargo de mi.

— No hay de que. Deberías darte una ducha y puedo llevarte a tu departamento.

— ¿Quieres deshacerte de mi Jeikei? — el rubio enarcó una ceja y se giró a verlo. El tatuado se mordió los labios.

— Claro que no, para mí es lo mejor que estes aquí.

— ¿Si? ¿Por qué? — Minnie se acercó peligroso y sonrió muy leve. Rió al escuchar un largo suspiro del otro.

Jungkook no tardó mucho para dejarse ir a su cuerpo y abrazar su cintura, en un instante Jimin hizo lo mismo. Le empujó hasta la mesa y sentó sobre ella.