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DURMIENDO ES AQUELLA CAMA DE SATEN COMODA Y CALIDA yacía Naerys, quien aún no despertaba luego de dos días inconsciente, nadie sabía que le sucedía solo se sabía que la Gran Madre quería a la pequeña niña deforme en su torre. Una niña de cabellos rojizos entró corriendo a la habitación y empezó a picar la mejilla de Naerys mientras la llamada "Gran Madre" entraba detrás de la niña pelirroja.
—¿Está muerta? —pregunta inocentemente la niña.
—No, solo está dormida —responde la mujer— tal vez despierte hoy o mañana, pero despertara —le asegura.
La pequeña niña observaba a la pelinegra dormir plácidamente mientras que la mujer empezaba a preparar un tónico con diferentes hierbas y sales, en tanto, en King's Landing rumores de que el joven tercer príncipe Aemond Targaryen había cambiado por completo pues antes solía huir de las burlas de su hermano y sobrinos pero ahora caminaba con tanta seguridad, su mirada se volvió feroz y sin vida, ahora ya no dejaba que su hermano mayor se metiera con él.
Asistía a cada clase de historia, filosofía y Alto Valiryo, entrenaba con la espada desde que el sol salía hasta que el sol se escondía, en la mente de Aemond solo existía el pensamiento de venganza, venganza contra su hermano, venganza para Naerys, venganza a toda aquel que se atrevió a faltarle al respeto. Aun así en las noches las pesadillas con su sobrina lo atormentaban lo que provocaba que no pueda descansar correctamente.
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Desorientada, sola, asustada y confundida así es como se siente Naerys al despertar en aquella habitación oscura con la luz de la luna entrando por aquella ventana. Se quita las mantas, baja de la cama y trata de caminar pero se da cuenta de cuanto le cuesta caminar, lo débiles de su piernas luego de ser lanzada al agua y el como le duele su espalda por estar apoyada en ella mientras dormía.
—El dolor pasará —le asegura una voz masculina desde el umbral de la puerta, Naerys voltea y ve a un hombre canoso de unos 60 años, usando una larga túnica color verde con detalles de gemas preciosas y bordado negro— No te asustes, ya estas a salvo —le dijo con calma y suavidad al notar que Naerys se ponía alerta.
Pese al tono de voz del hombre Naerys no se confió, así que corrió hacia una mesita cercana y tomó un cuchillo que convenientemente estaba ahí, trató de atacar al hombre pero fue detenida en el aire por una fuerza invisible, detrás del hombre había una mujer de cabello negro largo y vestidos verde con bordados negros y una sola gema preciosa incrustada justo en el escote como simulando el corazón.
—Es una bestia, no conoce nada de esto, solo traerá problemas —dijo seria la mujer.
—Tu también eras desconfiada cuando llegaste —le responde el hombre y mueve su muñeca haciendo que la "fuerza invisible" que retenía a Naerys ya no este— es una niña pequeña, asustada, sola —le sonríe a Naerys con amabilidad— por favor regresa a la cama
Naerys sin muchas opciones, retrocede y se sube nuevamente a la cama, pero aun así manteniendo el cuchillo en su pequeña y temblorosa mano.
—Déjame presentarme yo soy Daisuke Boleoti, ella es mi esposa Kasia —se presentó el hombre y a su esposa— Teraydes te trajo aquí hace días atrás, este es un lugar seguro, un lugar donde tu madre ni nadie podrá llegar —le asegura.
—¿Que es este lugar? —preguntó Naerys timida y desconfiada.
—La Torre Black —responde tranquilo el hombre— es un lugar para personas como tú
—¿Personas como yo? —preguntó con curiosidad.
El hombre asintió y la mujer sólo observaba todo en silencio, Daisuke se acercó con calma y serenidad hasta la cama y se sentó al borde de esta poniendo a Naerys en alerta.
—Tú provienes de un linaje muy antiguo, más no tan poderoso como ahora —le empieza a narrar— cuando el llamado Aegon El Conquistador llegó a las tierras de Westeros, lo primero que hizo fue pedir consejo a Daenys Targaryen, la mujer que profetizó la caída y destrucción de Valirya —le cuenta— lo que nadie sabía era que Daenys no era una llamada "soñadora", era una bruja —cuenta el hombre.
—Los libros no dicen eso —susurra Naerys confundida.
—Eso es porque los libros no siempre tienen la historia completa —dice la mujer con seriedad— Daenys en busca de ayuda para sus poderes, encuentra al difunto gran mago, padre de Daisuke —le narra ahora Kasia— quien la adopta junto a otras 12 niñas y las llamo hijas, así fue como se creó la primera generación de las 12 hermanas —cuenta la mujer.
—Daenys conociendo el futuro y la locura de su familia con ayuda de sus hermanas decide tratar de sacar la magia del linaje Targaryen —cuenta ahora Daisuke— no obstante no lo logró, Daenys en desesperación decidió pedir ayuda a mi padre quien le dijo que no podía eliminar la magia de su sangre pero que si podía volverla más débil —cuenta tranquilo— así es como por generaciones solo hubo un miembro Targaryen que era una "soñador" y cada 2 generaciones Targaryen, nacía un bebé con la magia antigua de Daenys —termina de contar.
—Ahí es donde entras tú —dice Kasia— perdimos a una hija y tu perdiste a una familia —dice seria— te damos la oportunidad de poder ser poderosa, temida, feroz
—¿Creen que yo tengo magia? —pregunta confundida Naerys.
—Lo sabemos —corrige Daisuke— solo que esta algo así como dormida
Naerys se niega a creer que es capaz de sobresalir, no lo hizo en años, ¿y ahora milagrosamente resulta ser poderosa? No se lo creía.
—Se que no nos crees, pero te aseguro que es real, solo necesitas entrenamiento y ya —trata de convencer Daisuke.
—Estas muy cansada, dejaremos que descanses —Kasia mira a su esposo en señal de que ya era suficiente por hoy—mañana te vuscaran para ir a desayunar
Cuando ambos adultos se van Naerys queda pensativa sobre lo que acaba de decirse, resuelta que un antepasado suyo era bruja y que hechizo a su sangre para que sus hijos no posean magia porque los Targaryen estaban locos, esa parte sonaba muy razonable para Naerys, pero no la parte en la que ella nació con magia.
Eso era imposible, sobre todo porque ella era un cerdito, feo, débil e inútil.
