¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ERA DE NOCHE CUANDO TODOS EN LA FORTALEZA ROJA DESCANZABAN EN LOS BRAZOS DE MORFEO, Naerys estaba en sus aposentos haciendo un muñeco hecho de paja mientras Silas la observaba sentado a su lado, lo único que sabía era que la sonrisa de Naerys asustaría hasta al guerrero más temible.
—En este momento Alicent esta con su majestad el rey —dijo Naerys tranquila rompiendo el silencio.
—¿Que es lo que harás con ese muñeco? —pregunto Silas.
—¿Alguna vez oíste del mentalismo? —pregunto y Silas nego— s una rama de la magia que me enseñó Kasia... un hechizo simple pero muy eficiente —explicó tranquila.
Naerys siguió enrollando un hilo en el cuello del muñeco de paja tranquilamente.
—Justo ahora, Rhaenyra esta confiada en su reclamo al trono... Aegon no tiene ambiciones y Aemond esta desesperado por dejar de ser impotente —dijo tranquila— aprovecharé que mi abuelo fue un soñador, aprovecharé los susurros del pasado y destruiré el futuro —una sonrisa malvada apareció en su rostro.
Mientras al mismo tiempo en los aposentos privados del rey se encontraba Alicent con su esposo dándole la medicina qué calma el dolor del pobre hombre, sin saber qué Naerys manipulaba la mente y la lengua de su Majestad.
Naerys empezó a susurrarle al muñeco y al mismo tiempo Viserys repetía sin poder luchar contra la magia de Naerys mientras Alicent escuchaba creyendo que Viserys hablaba por libre albedrío, sin saber qué solo caía en la trampa de la joven mujer.
—"Lo siento..." —empezó a repetir Viserys mientras era controlado por Naerys quien susurraba al muñeco desde sus aposentos privados— "Tú querías saber... si yo creo que sea verdad..."
—¿Que sea verdad qué, mi rey? —pregunto Alicent mientras acariciaba la mano del rey.
—"¿No lo recuerdas?" —pregunto aun bajo el hechizo de Naerys— "Aegon... Su sueño" —dijo jadeante el el rey— "El príncipe... para unir al reino... en contra del frío y de la oscuridad... Eres tú... Debes hacer esto... Aegon" —el rey se quedo dormido.
Naerys termino el hechizo, lanzó el muñeco al fuego de la chimenea mientras sonreía triunfante, Silas entendió todo.
—Esto iniciará una guerra —dijo Silas.
—Lo sé —respondió— ese es el plan —dijo tranquila— le quitaré a Rhaenyra todo lo que ama... iniciando con su padre y la corona —Naerys tomo un pequeño frasco con un liquido negro.
Tranquila la joven empezó a caminar hacia los aposentos de Viserys, nadie notaba que ella estaba fuera de sus aposentos. Aun faltaba mucho para culminar con su plan pero era un bien comienzo, todo el dolor, toda la ira, todo el odio, todo empezaría a salir todos empezarían a temblar de miedo. Rhaenyra se arrepentiría del día en que parió a Naerys.
Antes de entrar se aseguro que nadie este en cerca y una vez todo estuvo seguro entro a los aposentos de su abuelo y tranquila se acercó a la cama donde estaba el rey, quien despertó al sentir a alguien sentarse a su lado en el borde de la cama.
—¿Quien...? —dijo débilmente.
—Soy Naerys —dijo tranquila.
—Naerys... mi única nieta... —dijo débilmente.
—Si —sonrei con malicia— ay Viserys... el rey pacífico... el débil... si tan solo hubieras tenido las bolas... —dijo con ira reprimida— es una pena... —suspiro— ahora te contaré un secreto —se acercó a su oido— la verdad es que te odio y odio todo lo hiciste... Ignorar a Aemond, no darme justicia ni a mi ni a tu tercer hijo... Dejar que Rhaenyra me tratara peor que a un esclavo —susurró con odio— Eres patético y débil... y tú solo te provocaste esto —susurro con odio— ahora voy a matarte y luego... iniciare una guerra tan grande que incluso los dioses temeran —vertio el liquido negro en la boca de Viserys— saluda a tu esposa cuando llegues al infierno —salió de los aposentos tranquila dejando que el veneno acabe con Viserys rápidamente.
El veneno venía de una flor que solo crece en las ruinas de Valirya, es una flor rara pero muy eficaz a la hora de asesinar, no dejaba rastro por lo que todos creerían que Viserys I Targaryen murió por su enfermedad y no porque su nieta lo asesinó.
🐉
Al día siguiente el caos empezó, la noticia de la muerte de Viserys se extendió por la Fortaleza Roja y Otto para impedir que Rhaenys o Naerys le advirtieran a Rhaenyra las encerró en sus respectivos aposentos, pero Naerys estaba tranquila ella no iría a avisarle a Rhaenyra eso lo haría Rhaenys.
Al final Rhaenys fue la primera rescatada por Sir Erryk quien no podía permitir semejante insulto, mientras Naerys hacia un hechizo a Rhaenyra en un cuenco con agua y un poco de su propia sangre.
—Sangre de mi sangre es... Más carne de mi carne no es —empezó a recitar— pobre bebé pues muerto tu has de nacer —lanzó más de su sangre al cuenco con agua que se volvió negro.
En ese momento Erryk entra y libera a Naerys quien estaba tranquila, no se preocupaba por Nyxal ya que su dragón escapo la noche anterior y la esperaba en las costas de King's Landing. Naerys subió a su dragón.
—¿Que paso, cachorra? ¿Ya mataste al viejo? —pregunto Nyxal mirando a Naerys.
—Si, ahora vamos a Dragonstone, quiero ver una última cosa —dijo divertida y el dragón emprendió vuelo.
🐉
Aemond encontró la nota que Naerys le dejó, sorprendiendolo ya que habían compartido cama.
"Mi querido Aemond, lamento dejarte sin explicaciones y lamento que te enteres por terceros de mis acciones pero todo lo que hago lo hago para comodoro ni promesa de una corona y un trono.
PD: Quema esta carta y cualquier carta que te envié en el futuro."
Aemond tras leer la carta entendió todo, la muerte de Viserys fue provocada por ella, ¿que más provocó ella? Sin pensarlo quemo la carta y luego fue en busca de su hermano mayor, por ahora seguiría el juego hasta que Naerys se contacte con él nuevamente.
🐉
Rhaenyra tras recibir la noticia de la muerte de su padre queda en shock sin creerlo aún, pero la noticia de la traicion de Alicent dolió aun más.
Por el dolor de la pérdida de su padre su fuente se rompió, Naerys observo todo al lado de Rhaenys. Daemon estaba con un profundo dolor tras la noticia de la muerte de su hermano y sin creer que Viserys murió de causas naturales y tenía razón pero apuntaba a la persona equivocada.
Naerys observo como Rhaenyra empezaba el labor de parto, feliz de saber que le arrebato otra cosa a Rhaenyra mientras Daemon perdía la cabeza, sumido y cegado por el dolor y la ira de la traición.
