—Lo entiendo. Créeme que lo entiendo—.
Cuando Gawin quiso irse solo, me enfurecí. Le dije cosas de las que me arrepentiré por el resto de mi vida. Pensé que serviría mejor a su manada aquí, trabajando a mi lado. Pero luego me di cuenta de que solo me estaba aferrando a él con fuerza. Necesitaba dejar que se labrara su propio lugar en el mundo. Tal vez si me hubiera mantenido firme y le hubiera dicho que no a ser cazarrecompensas, todavía estaría con nosotros. Pero se hubiera sentido miserable.
Singto inhaló profundamente, reprimiendo sus emociones con la esperanza de que Off no viera lo mucho que estaba sufriendo. —No me arrepiento por las decisiones que tomé. A pesar de lo que pasó. Porque al final, Gawin sabía lo que estaba haciendo. Demonios, estaba haciendo lo que le había enseñado a hacer. Proteger a los débiles. Luchar por lo que es correcto.
—Sé que tu padre solo quería lo que creía que era lo mejor para ti. Es difícil dejar ir a alguien por quien has trabajado toda tu vida para guiar y proteger.
No tomes su silencio como una falta de aceptación. No lo conozco tan bien como tú, pero me imagino que era igual de terco.
Off resopló y sonrió. —A veces eres más terco que yo.
—Bueno, eso dice mucho —Singto sonrió—. Mira, nunca te obligaré a hacer algo que no quieras hacer. Eligiré a alguien más si eso es lo que realmente quieres, aunque creo que eres la mejor opción. Pero, si no quieres enfrentarte a tu padre porque crees que te despreciará por tus elecciones, entonces lo mejor que puedes hacer es pararte frente a él y demostrarle que estaba equivocado.
—Muéstrale el hombre en que te has convertido. No solo eres un querido miembro de nuestra manada, sino que ocupas una posición de autoridad. Un puesto muy respetado. Eres el segundo después de mí. Eso debería hacerte ganar algunos puntos.
—Debería haber sido Gawin — Off volvió la vista al suelo. Un aire de silencio flotaba entre ellos por un momento.
—Gawin tomó su decisión. Y yo la respeté. Me hubiera encantado tenerlo como mi segundo, pero no era el camino que él quería seguir. Sin embargo, este camino estaba destinado a ti. Gawin incluso me dijo una vez que el único hombre además de mí en quien confiaba su vida eras tú. Se alegró cuando te presentaste como jefe de seguridad.
Off se recostó, considerando lo que había dicho Singto. Gawin siempre había sido miembro de la manada, pero su trabajo lo mantenía alejado durante días, semanas e incluso meses. Se comunicaba a menudo, pero cuando estaba en una guardia, pasaban semanas de silencio. Sin embargo, sabía que siempre tenía un hogar en Black River, siempre que lo quisiera o lo necesitara. Si Gawin se hubiera quedado y tomado una posición dentro de la manada, habría sido la elección lógica para el jefe de seguridad y el segundo al mando de Singto.
Como Singto no tenía hijos, Gawin también habría sido el siguiente en la línea para convertirse en alfa. Sin embargo, había renunciado a todo eso para perseguir su sueño. Off respetaba eso de él. Incluso se inspiró en Gawin. Off nunca quiso trabajar para la seguridad alfa, bajo la atenta mirada del Concejo de Cambiaformas. Ciertamente no era un burócrata gordo, sentado sobre su trasero todo el día haciéndose rico mientras tantas manadas sufrían.
¿Cuándo se había vuelto la sociedad cambiante tan malditamente política? Culpó a la influencia humana y a la necesidad de tantos de demostrar su propia valía que habían olvidado el verdadero significado de estar en una manada. Supervivencia sí, pero también compasión, aceptación y hermandad. Los fuertes protegían a los débiles y a toda la manada, no solo los superiores estaban protegidos y provistos. Silver Moon parecía haberlo olvidado también, ya que funcionaba más como un campamento de esclavos que como una manada real.
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𝚂𝙴𝙼𝙿𝙸𝚃𝙴𝚁𝙽𝙾 ꜱᴋ
FanfictionKrist ha escapado de su manada de nacimiento y de un compromiso no deseado con Max Saran hermano del alfa Zee Pruk. Zee contrata y paga una cantidad de dinero a Gawin un cazarrecompensas para que capture al omega, pero cuando Krist le pide ayuda le...