Capítulo 1

10 0 0
                                    

Luego de terminar mi desayuno, me alisto para ir a trabajar, hoy es viernes así que me tomaré el tiempo de pensar en la propuesta de mi hermano.

—Me voy... —me despido de Dylan

—¡Cuidate! —me grita desde la cocina

Salgo de mi departamento y me voy a tomar el camión.

«—Lo sé, pero queremos a alguien de suma confianza, después de todo tú...»

Sacudo la cabeza alejando su comentario, me muerdo el labio y observo el camino. No volveré a hacerlo, me costo años alejarme, ¿me quería matar?
Suspiró y bajo del camión.
.
.
.

Llegó a la escuela de idiomas en la que imparto clases de español a extranjeros que venían de intercambio.
Me voy a la dirección a registrar mi llegada, saludo a la secretaria de ahí y me dirijo a mi salón.

—Buenos días Amanda...

Me detengo al escuchar la voz de Pedro.

Maldición...

Le miro y sonrió lo mejor que puedo —Buenos días... —sigo mi camino pero él de inmediato me sigue el paso.

—Me preguntaba... Bueno... Ya sabes... Quería... Saber...

Miró al cielo discretamente al escuchar los tartamudeos de Pedro.

—Si este sabado...

—Si, —le corto —Voy a salir de viaje.

—Ah... ¿Si? Wow, genial...

Asiento y sigo mi camino sabiendo que no me seguirá.
Salí con Pedro una vez luego de que insistió durante meses, pero no fue muy placentero que digamos.
Entró al salón y todos mis alumnos se callan, si hay algo que me gusta, es el orden.

—Good morning...

—Good morning teacher! —me responden todos al unísono.

¿Por qué el inglés debía ser la lengua más solicitada? ¿Por qué no el Japonés? ¡Lo amaba! ¿Francés? ¿Maya?

—Open your books on page 37... —ordenó mientras dejó mis cosas en mi escritorio.
.
.
.

Cuando las clases terminan, estoy molida, machacada, aplastada y todo lo que termine en -ada... Así que lo unico que deseo es llegar a dormir a casa. 

Al entrar, el olor a comida me invade de nuevo haciendo que mi estomago ruja, estoy realmente sorprendida de saber que mi hermano ha cocinado dos veces seguidas sin quejarse.

—He regresado... ¿Los planetas se alinearon?

Su sonrisa no se hace esperar. —¿Hambre?

—¡Mucha!

Dylan me sirve la cena, spaguetti con albóndigas y un poco de champaña rosa.

—¿Qué celebramos? —tomo la copa y bebo un poco

—Nada específicamente, vernos ya es motivo de celebración.

Cenamos con calma, hablando de todo y nada a la vez. Recordando viejos tiempos.

—¿Y cuándo me pegaste chicle en el cabello? —rio mientras lavamos los platos juntos.

—No fue mi intención...

—Siii... Claaaarooo... —niego feliz

Al terminar, me recargo a espaldas del fregadero mientras mi hermano, mellizo por cierto, se recarga en la isla.

—Dime mi querida Amanda, hermana, melliza... —sonríe él, muy poca gente sabe que somos mellizos, si no es que nadie. —¿Cómo vas en tu vida amorosa? El compañero panzón ya te logró conquistar, ¿eh?

Bufo irritada —No vuelvo a salir con alguien sólo por compromiso. —me cruzo de brazos.

—Amanda, Amanda... —mi mellizo sonríe divertido —Conociendote como te conozco, se que es el único hombre con quien has salido.

Le miró asombrada antes de sentir mis mejillas picar levemente. Me ha atrapado. —¿Tú qué sabes? —me defiendo

Cambio De Vida... |Trilogía Encrucijada #1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora