Amor de contrabando

12. Nueva misión

¿Qué tal mis amores, me extrañaron? 😃 Bueno, pues me extrañen o no, aquí tienen otro capítulo de este hermoso libro Jsjsjs.
Bueno aquí os lo dejo.

Después de la noche anterior, (Y de que Tom y Maddie tuvieran que llevar a los dos erizos que se habían quedado dormidos en el jardín a la cama 😃☝🏻) todos los Mobians más Christopher y su abuelo se encontraban en el taller de Tails ayudando al zorrito.

Aunque el erizo azul se encontraba haciendo nada más ni nada menos que nada, porque no le habían encargado más que cosas realmente simples. Y él quería ayudar con algo mas difícil.

—¿Puedo ayudar en algo? Ya sabes, tipo conseguir piezas o hacer algo interesante.– comentó el azulado moviéndose alrededor de su amigo de dos colas, se notaba impaciente por poder hacer algo. Chris y su abuelo estaban ayudando a Tais, con lo cuál no había mucho que él pudiera hacer.

—Uh, lo siento, pero hasta el momento creo que no necesitamos...

—Claro que puedes ayudar, Sonic.– interrumpió el zorrito, los ojos de Sonic brillaron.

—¿Ah, sí? Pensé que lo teníamos todo controlado.– mencionó el de pelo castaño mirando confuso al zorrito.

—Si, pero necesitamos algunas piezas.– contestó revisando un plano con la estructura de la máquina que estaban construyendo.

—En ese caso puedo ir a la ferretería y...

—No, estas piezas no se consiguen tan fácilmente. Son piezas de tecnología antiguas que contienen un gran poder, ese poder será uno de los que nos traiga de vuelta a Mobius.– interrumpió frunciendo el ceño con seriedad

—¿Entonces? ¿Puedo traerlas yo?– sonrió emocionado el erizo azul. Tails suspiró por la impaciencia de su amigo y asintió.

—Sí, Sonic. Puedes– Sonic dió saltitos de la emoción.—Pero te aviso, estas piezas están expandidas por partes del mundo. Será un viaje peligroso, pero confío en que puedas hacerlo. Aunque por favor, se prudente. Te daremos la esmeralda maestra por si pasa algo, pero úsala con prudencia, y cuídala– explicó Tails con cierta preocupación. Pero Sonic solo sentía emoción por una nueva aventura.

Los ojos de Shadow se abrieron de par en par al escuchar la mención de la esmeralda maestra, la esmeralda que estaba buscando podía ser suya en un santiamén. Pero por otra parte, no quería dejar a Sonic, no quería hacerle daño. Pero lamentablemente, la decisión ya estaba tomada.

—Yo iré con él.– se ofreció el azabache acercándose a ellos. Sonic lo miró sorprendido y sonrió de oreja a oreja.

—Aww, irás conmigo porque me quieres, ¿Verdad?– dijo Sonic con cariño y un hilo de burla hacia el moreno.

—Mas bien para que no te mates, azulejo.– contestó con un poco de burla y una sonrisa ladina

—¿Azulejo?

—¿Qué pasa? ¿Tú me puedes poner motes y yo no?– alzó una ceja cuestionando a Sonic con la mirada. Este puso sus manos al frente y se excusó.

—No, no. Si me ha encantado, por supuesto que me puedes poner motes. Es más, hazlo por favor, me enamoras más.– contestó acercándose más a él.

—Idiota.– dijo sin poder contener una sonrisa. Sonic rió por lo bajo.

—Sí, pero soy TÚ idiota. Admítelo, me quiereees~– molestó mientras se acercaba más a su cara por el costado de esta.

—Supongo que no puedo mentir ante esa verdad.– lo miró haciendo que sus ojos se cruzasen y sonrió coqueto.

—Awh, yo también te amo.– sonrió coqueto y acercó su rostro para poder plantarle un beso.