LA SECTA

CAPÍTULO 104

Si sólo estuvieran Pei Yunshu y Zhuyou, subir al barco sería cómodo. Por desgracia, también tenían un pequeño huevo de dragón extremadamente pegajoso que tenía miedo de los lugares oscuros y tranquilos, y no podía ser colocado en una bolsa de almacenamiento.

Al final, Pei Yunshu, inexpresivo, dejó que Zhuyou le vistiera de mujer embarazada.

Era la primera vez que Pei Yunshu vestía ropa de mujer. Llevaba el pelo recogido y algunos mechones le caían sobre las mejillas, lo que hacía imposible distinguir su sexo, asemejándose a una mujer realmente hermosa.

Aunque delgado, su vientre sobresalía sin parecer hinchado, portando un encanto suave y hermoso.

Si su expresión no fuera tan fría, sería aún mejor.

La expresión de Pei Yunshu no era muy agradable. Zhuyou le consoló suavemente, sosteniéndole la cintura mientras salían de la posada.

En comparación con su estado de ánimo, el pequeño huevo de dragón estaba extremadamente alegre, aferrado obedientemente a Pei Yunshu, casi quedándose dormido con tranquilidad junto a los pasos de su padre.

Zhuyou apoyó a Pei Yunshu, y aunque Pei Yunshu pretendía apartarle, tuvo que acceder a regañadientes, manteniendo la cara seria. "Me cambiaré de esta ropa cuando estemos en el barco."

"Muy bonito", dijo Zhuyou, "No hace falta que te cambies."

Pei Yunshu echó un vistazo al huevo de dragón bien envuelto y, sin vacilar, dirigió a Zhuyou una mirada insatisfecha. "¿Por qué no te lo pones?"

"No me gusta", dijo Zhuyou despreocupadamente. "Esposa, no lo pienses demasiado. Ya casi hemos llegado."

En la boca del mar estaba anclado un lujoso y exquisito barco. A bordo había muchos guardias con espadas, todos con aspecto serio. Zhuyou apoyó a Pei Yunshu mientras subían al barco. Cuanto más se acercaban, más podían sentir una energía espiritual que rodeaba todo el barco como un talismán de papel.

Pei Yunshu entrecerró los ojos y miró el costado del barco. Las tallas de madera del barco estaban cubiertas de talismanes de papel densamente empaquetados, perfectamente integrados en las tallas como una obra de arte.

Había guardias en el lugar de embarque. Zhuyou medio abrazó a Pei Yunshu y le presentó las dos invitaciones. Después de que los guardias comprobaran las invitaciones, también registraron sus pertenencias, especialmente sus mangas y el interior de sus túnicas, presumiblemente para evitar que llevaran armas como dagas al embarcar.

En ese momento, Pei Yunshu se alegró de haberse vestido de mujer. De lo contrario, si los guardias hubieran encontrado el huevo de dragón, las cosas habrían sido problemáticas.

Tras asegurarse de que no llevaban nada sospechoso, los guardias les permitieron subir a bordo, y una encantadora doncella les guió.

A pesar del enorme tamaño del barco, el número de personas que entraban y salían era muy reducido. Todos iban magníficamente vestidos y, a primera vista, estaba claro que aquí no había simples individuos.

El sentido espiritual de Pei Yunshu se extendió lentamente como una red de pesca, ocupando todos los rincones del barco. Su sentido espiritual era tan poderoso que casi nadie podía percibirlo. Pronto, incluso antes de que la doncella les condujera a su habitación, Pei Yunshu percibió el paradero de Bai Lige, Hua Yue y Qingfeng.

Frunció el ceño y transmitió mentalmente: "Bai Lige y Hua Yue están juntos en un lugar, Qingfeng está en otro. Bai Lige y Hua Yue tienen auras demoníacas débiles. Iré a salvarlos. Tú ve a rescatar a Qingfeng."

Zhuyou le dio una palmadita en la mano y asintió suavemente.

Después de que la criada les condujera a su destino, Pei Yunshu le pidió que se marchara. Al cabo de un rato, los dos, uno a cada lado, fueron a rescatar a sus amigos atrapados en habitaciones secretas.