= Soul, asistiendo a clases en Shibusen (mientras Maka sigue en Casa)=
Como si la mesa fuese un piano, soul agitaba sus dedos, había una percusión que estaba atormentando su calma, sonando desde su corazón y trazaba partituras en su cerebro.
El sonido, como sí el sonido tuviese cuerpo, susurraba en sus oídos, cuál fantasía impedía su concentración en clase. La música, cual tinta oscura o sangre oscura, ansiaba apropiarse de sus sonetos, seduciéndolo para plasmarla en el teclado, carcomiendo cuáles hormigas en su piel.
Aprovechando la ausencia de su técnico, Soul se escabulló de la escuela durante la hora del almuerzo. Sus pasos lo guiaron hacia una cafetería recóndita en el corazón de la ciudad, donde un piano aguardaba en silencio.
Solicito permiso del dueño para usar magno instrumento. Al rozar la primera tecla, intentó contener el torrente de emociones que amenazaba con desbordarse. Como si la composición fuese su segunda piel, la música fluía a través de él, reminiscente de la intensidad como la primera vez que beso con Maka.
Cada nota resonaba con una pasión incontenible, y Soul se encontró sumergido en un mar de sonidos y sensaciones, olvidando por completo el mundo exterior. Su sonido choco con la comisura de su compañera, fueron un encendedor que se convirtió en una hoguera.
No podía desenfrenar su ritmo, incluso en sus fantasías, su ritmo arrítmico tenía sincronía, cuando llego a su cuello, la música tenía otra intensión, mordisqueando, chupando donde no debía y se detuvo cuando sus manos rozaron por debajo de su blusa.
La música cesó abruptamente. Soul, con la respiración entrecortada y el corazón desbocado, se percató de su entorno. La locura musical lo había arrastrado a un trance del que apenas despertaba.
Su actuación atrajo a una audiencia enardecida, que aplaudía emocionada "¿En momento atrajo tanto público?" Abrumado, giró para huir, pero sus ojos se encontraron con Maka entre la muchedumbre. Ella estaba allí, con la respiración agitada, el cabello revuelto, su camisa en desorden y su cuello, con marcas de un momento pecaminoso.
Soul se frotó los ojos con fuerza, intentando aclarar su visión. En un parpadeo, la imagen de Maka se desvaneció como un espejismo. Aturdido, salió precipitadamente de la cafetería, corriendo hacia su departamento. Un torbellino de pensamientos lo asaltaba:
"Esto tiene que parar. el juego que tenían era muy peligroso. ¿Cómo es que estaba teniendo fantasías con su compañera?"
Al llegar, encontró a Maka preparando la cena. Verla provocó en él una mezcla de vergüenza y desánimo, recordando que aún le quedaba "un día" más de este drama emocional. Sin embargo, el aroma tentador de la comida despertó su apetito, ofreciéndole una distracción bienvenida de aquella melodía obsesiva que lo perseguía.
=Soul llegando al departamento más tarde ese día=
Maka había preparado la cena con esmero para soul, había sido un día agotador, pero aún más para su compañero que había cuidado de ella y ella no se había portado del todo bien.
El Arma ingreso al departamento intentando mantenerse calmado al cruzar sus miradas, sobre todo cuando hace no muy poco, fantaseó con ella, en esa melodía.
—Bienvenido— dice Maka con una cálida sonrisa.
—Hola. ¿Qué preparaste para cenar? —pregunta Soul mientras entra.
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Un beso y una canción de Jazz. (SoulxMaka) (COMPLETADA)
RomanceSoul y Maka compartieron un beso impulsivo antes de una batalla potencialmente fatal, lo que desencadenó sentimientos confusos entre ellos. Sus amigos notaron cambios en su dinámica, percatándose que ambos se gustan, pero propios protagonistas no pa...