Mi historia de amor/T/n Montemayor♥️✨️

CAPÍTULO 15

- Sí, sabes que retener a alguien contra su voluntad se llama secuestro, ¿No? - sonríe arrogante, mientras estaciona en el garaje de la casa de Cesar.

Estúpido y sexy Parra.

- Bueno, te gusta provocarme y termino haciendo las cosas de la forma difícil - dice arqueando una ceja.

- Yo creo que eso te gusta...que te provoque y te rete - yo también arqueo una ceja.

- Entonces somos tal para cual - dice cuando subimos al ascensor.

Lo miro con los ojos entrecerrados. ¿Está bromeando? ¿El Cesar divertido regresó?

- Solo una cosa, T/n. Y no estoy jugando - se gira para tomar mi rostro con sus manos - Eres mía, solo mía.

Lo miro sin saber qué decir, hasta que el timbre del garaje lo hace girar y salir. Lo sigo en silencio.

- ¿Esto es por el chico del cine? ¡Tú no quisiste ir conmigo! - alzo la voz.

- Es sobre ti, hablando con chicos que quieren ser más que solo amables - me dice serio.

- ¿Entonces no puedo hablar con nadie? - me acerco a él - Que hable con un chico no significa que esté interesada en él.

No dice más, permanece en silencio y apoya su mano en su barbilla. Tengo miedo de preguntar qué pasa por su controladora mente.

- Bien, entonces serás mi novia y nadie podrá acercarse a ti - suelta de pronto.

- ¿Me preguntas o me ordenas? Porque eso, señor Parra. Sonó a orden y no me gusta que me den órdenes - Cesar sonríe y mete las manos a sus bolsillos.

- No puedes hacer que algo sea fácil, ¿Cierto?

- No sería divertido - le sonrío burlona.

- Señorita Montemayor - se acerca con paso seductor - ¿Quisiera usted ser mi novia?

- Eso depende, señor Parra, ¿Lo hace para controlarme? - aunque creo que es obvio.

- Le aseguro, señorita Montemayor. Que le gustará ser controlada - me da su media sonrisa sexy.

- No sé siquiera...pero suena divertido - le sonrío - Es usted un romántico, señor Parra.

De pronto palidece. Este hombre pasa de 100 a 0 más rápido que su Cámaro. ¿Qué parte de lo que dije lo dejó muerto de miedo?

- Ven, vamos a cenar. Mi nana dejó la cena preparada - da la vuelta y camina.

Lo sigo en silencio y se acerca al horno para sacar una charola. Huele a papas horneadas y pimientos.

- ¿Mucho trabajo en la oficina? - le digo para cambiar el tema.

- Un poco. ¿Mucho trabajo en la editorial?

- ¡Oh, sí! Tengo que ponerme al corriente con todo lo que la ex asistente dejó.

- ¿Has tratado con Luis Coronel? Hay algo en su expediente que no me gusta. Recursos humanos están haciendo auditoría de todo el personal.

- No mucho - encojo mis hombros - No habla mucho, solo me habla para darme órdenes - Cesar me mira y arquea la ceja.

- Ja-Ja - digo con sarcasmo - Es mi jefe.

- Yo también soy tu jefe, el jefe del jefe de tu jefe - sonríe.

Pongo los ojos en blanco. Sirvo en los platos, mientras sirve el vino en las copas, me encanta la comida de la señora Jones.

Después de cenar y recoger los platos, vamos a sentarnos en la sala frente a la chimenea.

Pone mi copa y la suya en la mesita, para acercarse a mí y besarme. Lo atraigo más hacia mí, pasando mis brazos por su cuello.