"Eres un arma" - Genmui (Royal Au)

6-

– Shinazugawa-san – Llamó el padre del príncipe, a lo que él lo miró atento.

– Sí, mí señor – Respondió Genya.

– Déjanos a solas.

El guardaespaldas del joven príncipe reverenció – Cómo usted ordene.

Abandonó la habitación, quedándose junto a la puerta, firme y de pie.
Estaba entrenado para seguir las órdenes de cualquiera de sus superiores, aunque preferiría seguir las órdenes del príncipe únicamente.

– Nee, Genya-san – Llamó Kotetsu, y al mirarlo, le extendió ropa mal doblada– Kanamori-san me pidió que te dé tu ropa, dijo que te cambies y me des la ropa que traes justo ahora...la limpiará para que esté lista para mañana.

Genya sostuvo la ropa – Entregaré mis prendas a Kanamori-san más tarde.

– Cómo quieras – Kotetsu se dio la vuelta y caminó por el pasillo.

Esperó de pie junto a la puerta durante un buen rato antes de que los reyes salieran del cuarto del príncipe. Entonces él ingresó, queriendo ver al príncipe.

– Tokito-san – Genya se acercó a la cama, dónde el príncipe se hallaba cabizbajo– aún está vistiendo la ropa ceremonial, puedo ayudarle a cambiarse si no se siente bien, o llamar a Kanamori-san para que lo haga.

– No, Genya...estoy bien – Respondió Muichiro, con la voz un poco apagada– Lo haré yo mismo, tu puedes ir a cambiarte.

– Si – Asintió – Volveré enseguida, Tokito-san.

El mayor se retiró del cuarto para ir al baño más cercano, se cambió la ropa por una más cómoda, y luego le entregó su ropa ceremonial a Kanamori personalmente.

Regresó casi apresurado a la habitación, sintiendo ansiedad de no estar viendo al príncipe.

– Tokito-san – Genya ingresó al cuarto nuevamente, y cerró la puerta – Ya he llegado.

– Fantástico – Respondió el príncipe. Y a Genya le sorprendió haberlo visto ya vestido con ropa para dormir– Me recostaré a dormir, Genya-san... tú deberías hacer lo mismo en tu habitación.

Genya negó – No, Tokito-san. Me quedaré con usted esta noche, haré guardia de su salud.

– No es necesario – Respondió suave el de ojos celestes– Créeme, ya me siento bien.

– Si mí presencia le incomoda estaré afuera entonces – Dijo él.

Tokito se sentó en su cama – No quiero que me protejas todo el tiempo, Genya-san...

Algo en el pecho de Shinazugawa se estrujó. ¿Por qué?

– Ve a dormir, es una orden.

Genya asintió – Entendido.

•

•

•

– El rey me comentó de un viaje en tren– Mencionó Kanamori mientras le servía el desayuno a Haganezuka.
Los empleados se levantaban más temprano para desayunar.

– Por fin me daré unas vacaciones de esa gentuza – Murmuró Haganezuka, comiendo un pastelito.

– Haganezuka-san, usted siempre está de vacaciones – Dijo Kotetsu, con la cara medio sucia con chocolate del pastel del día anterior.

– ¿Ellos se irán en tren? – Preguntó Goto.

– Aparentemente – Respondió Kanamori– escuché que era un viaje de negocios pero...quizás Tokito-sama quiera ir.