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– Disculpe mí atrevimiento, pero ellos no pueden ingresar – El de cabellos blancos los había guiado hasta un gran salón, pero no dejó pasar a Tanjiro e Inosuke – Sólo ingresan mucamas de limpieza y la realeza.

– Entendemos...– Tanjiro asintió, mirando a su amo un poco angustiado.

– Lo lamento, no tardaré – Se disculpó Tokito hacia sus súbditos.

Entonces el de cabellos blancos cerró las puertas del salón dejando a los otros afuera.

– Tanjiro – Llamó Inosuke, su voz se oía seria– Tengo un mal presentimiento.

Su amigo lo miró, y luego miró la puerta cerrada frente a ellos– Si...yo también.

Del otro lado de la puerta, un gran salón lleno de gente se hacía evidente. Muichiro caminó detrás del joven albino, y en algún momento sintió curiosidad.

– ¿Cómo te llamas? – Le consultó.

– Sanemi Shinazugawa – Contestó él.

Shinazugawa

Muichiro se inclinó hacia adelante, lleno de curiosidad – ¿Conoces a un tal Genya Shinazugawa?

Shinazugawa se alteró repentinamente, y volteó hacia él con su rostro pálido. – ¿De dónde... de dónde conoce a Genya? – preguntó.

Tokito se sorprendió por la reacción de Shinazugawa – Lo conozco porque... es mi guardaespaldas – respondió, tratando de calmar la situación.

Shinazugawa lo miró fijamente, como si no pudiera creer lo que estaba escuchando – ¿su guardaespaldas? – Repitió, su voz temblorosa.– Dígame...¿Sus ojos son morados y tiene cabello negro?

Tokito asintió – Así es...

– No puede ser  – Una sonrisa enorme pareció dibujarse bajo su velo negro – ¿Y él está bien?

– Pues...sí

Tokito empezó a sentir que algo estaba muy mal. ¿Por qué Shinazugawa se preocupaba tanto por Genya? ¿Qué relación tenían en realidad?

Tokito le pregunta por qué está tan interesado, y Shinazugawa confiesa que su hermano menor Genya fue secuestrado a sus 8 años de su casa y lo ha estado buscando desde entonces.

Tokito se sorprendió por la confesión de Shinazugawa.

– ¿Secuestrado? – Repitió incrédulo – ¿Y has estado buscándolo desde entonces?

– Sí, desde que tenía 13 años. He estado buscando a mi hermano menor durante 8 largos años, sin saber si está vivo o muerto...

Tokito se sintió conmovido por la historia de Sanemi – Lo siento mucho – Le dijo – No puedo imaginar lo que has pasado.

Sanemi se secó las lágrimas que empezaban a brotar de sus ojos – Gracias, príncipe Tokito. Solo quiero saber...¿Será posible que sea el mismo niño que yo he estado buscando?

Tokito asintió, pensando detenidamente  – Sí, es posible. Genya es un nombre bastante raro... y la edad coincide. Debe ser tu hermano.

Sanemi se levantó de su asiento, su rostro lleno de esperanza – ¿Ha venido con usted?

Pero antes de que Tokito pudiera responder, escucharon un ruido fuerte detrás de la puerta del salón. Sonaba como si alguien estuviera luchando.  Pronto la puerta fue derribada por extrañas personas, las cuales tenían la mirada perdida en la nada misma, y atacaron indiscriminadamente a todos los presentes en el salón. Empezando a matarlos, Sanemi tomó la mano del joven príncipe Tokito mientras lo arrastraba fuera del salón, mientras los atacantes continuaban su masacre. La escena era caótica, con cuerpos cayendo al suelo y gritos de terror llenando el aire.

"Eres un arma" - Genmui (Royal Au)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora