Capítulo V

34 17 1
                                    

—Algo anda mal…-se dijo Saint cuando vio a través del vidrio de la puerta a Zee.

La boca se le secó y comenzó a sentir calor. Nunca habían estado tan cerca.

Zee se agarro de la barandilla superior y miro de pies a cabeza a Saint quien permanecía a espaldas a él, medio recargado de las puertas del tren.

Saint era hermoso en toda la extensión de la palabra.

Tenía unas piernas hermosas o eso se apreciaba a través de su ajustado pantalón de sastre y que decir de ese trasero de infarto.

¡Woow!

Zee ansiaba tanto tocar, su suave y esponjoso trasero. Su mirada siguió de su muy buena retaguardia hacia su diminuta cintura subiendo por su espalda algo ancha pero bien definida. Su cuello se veía tan mordisquiable que la boca se le hizo agua.

Tragó saliva y se sintió acalorado.

—¡Dios!.-exclamó cerrando los ojos.

El suave perfume de Saint inundó sus fosas nasales. Suspiró.

Abrió sus ojos cuando el tren se detuve en la siguiente parada.…

INUSUAL Donde viven las historias. Descúbrelo ahora