Capítulo XVI

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Cuando despertó eran las cinco de la mañana, por lo regular se levantaba a las seis.

Miró a su derecha; Saint seguía ahí, completamente desnudo, hermoso como ayer. Le besó el hombro y se acurrucó junto a él de nuevo, pero no se durmió. Lo admiro todo el tiempo hasta las seis.

Saint se despertó un momento después. Bostezo, giró su cara y le sonrió a su acompañante.

—Buenos días.-saludos.

Zee sonrió..—Aún no es hora..-le dijo.

Saint ladeó la cabeza no entendiendo.

—Siempre me das los buenos días a las siete y quince en punto..-indicó el pelinegro.

Saint sonrió. —Supongo que debo irme a mi apartamento a ducharme y a cambiarme, para ir al trabajo.

—Supones bien.-respondió Zee

—Bien...

Ambos se pusieron de pie. Saint tomó su ropa, solo se puso la camisa y juntos caminaron hacia la puerta, se besaron con pasión.—Te veré en una hora.-susurró Saint sobre los labios ajenos. Zee asintió ido en aquel beso, y luego Saint salió del apartamento de Zee.

Una hora después...

Zee se acomodo la corbata, sonrió frente a el espejo. Miró su cuello lleno de chupetones. Se mordió el labio al recordar lo del día anterior, tomó sus llaves, su portafolios y salió de su apartamento.

—Buenos días Zee..

—Buenos días Saint..

Se saludaron como siempre pero de un modo Inusual ...

Caminaron como siempre, pero ahora uno al lado del otro de un modo Inusual. Subieron al tren, se sentaron juntos, sonrieron y conversaron de lo poco que se conocían de un modo Inusual.

Trabajaron hasta las ocho como todos los días, pero ahora sus miradas se encontraban a cada segundo, se sonreían y se coqueteaban de un modo Inusual.

Al término de sus labores hicieron el mismo proceso de regreso, pero.. ¿Hoy sería otro día inusual? Se preguntaron cuando el tren llegó lleno. Saint sonrió sonrojado y subió primero.

Zee se alboroto el cabello y subió después con una sonrisa coqueta. De nuevo en esa situación tan Inusual, pero ahora de un modo diferente.

Se agarró de la barandilla superior, rodeó a Saint por la cintura y lo atrajo hacia él, pegándolo contra su duro y firme pecho.

Saint suspiró y sonrió. Ladeo su cabeza buscando los labios ajenos.

Zee lo giró y lo besó dulcemente al castaño le temblaron las piernas.

El tren se puso en marcha con ellos besándose mientras el, propio tren hacia pegar sus cuerpos.

-Mmmm...-gimió Saint entre el besó

Zee sonrió.

A la siguiente estación, la gente prácticamente los aplasto contra si.

Zee y Saint rieron por la situación.

-De nuevo un día inusual .-susurró el pelinegro

-Me gusta ..-contestó Saint

Un señor lo empujó y su entrepierna se restregó contra la entrepierna de Zee.

-¡Aaaah!...-gimieron bajito los dos

-Hace calor no?.-preguntó Saint. El sudor comenzaba apegarle el cabello a la cara

-Mucha calor.-contestó Zee mordiéndole el cuello

Y ahí estaba de nuevo un día inusual.

El tren les dio un comienzo y su vida dejó de ser monótona y aburrida para convertirse en una relación Inusual.

Fin....



Espero que le haya gustado, y gracias por seguir aquí, se le quiere 🫶🏻💖

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